El suministro del hospital de Xàtiva retrasa la reparación de las fugas del canal de Bellús

Las filtraciones en la zona del Belluset vuelven a despertar quejas mientras el consistorio espera aprovechar la reducción del consumo de agua en el Lluís Alcanyís para cortar la conducción que abastece a Xàtiva

Fuga de agua en la zona del camí de Sant Antoni de Xàtiva, ayer.

Fuga de agua en la zona del camí de Sant Antoni de Xàtiva, ayer. / S. Gómez

S. Gómez

Reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC) por sus diez siglos de historia y su espectacular configuración, el canal de Bellús es una monumental obra hidráulica de 7 kilómetros de longitud que abastece a la población de Xàtiva después de recorrer una orografía de lo más compleja.

Pero la vetusta conducción hace aguas en diversos tramos debido a su deterioro y su complicado mantenimiento, a la espera de los trabajos de inspección y reparación de fugas proyectados desde hace años, que se han ido retrasando por las complejidades técnicas que entraña cortar el principal suministro de la ciudad, por muy breve que sea el periodo de la interrupción.

Las filtraciones del canal de Bellús a la altura del Belluset, en el sector del Pla de la Mesquita, han vuelto a generar quejas vecinales recientemente en uno de los puntos críticos más azotados por las corrientes de agua que de manera habitual invaden parcelas y caminos. La Plataforma Casc Antic Digne i Viu también se ha pronunciado al respecto: "el estado y mantenimiento de esta infraestructura básica de suministro de agua en la ciudad es deplorable y precisa de una intervención urgente e integral", ha manifestado el colectivo.

El Ayuntamiento de Xàtiva anunció hace casi un año que el canal quedaría inhabilitado durante tres días en enero para supervisar de manera exhaustiva su interior con un dron y detectar las fugas y obstrucciones de vegetación existentes antes de proceder a su reparación. Sin embargo, la programación ha sufrido vaivenes y el corte todavía no ha podido materializarse por las dudas sobre sus repercusiones. El abastecimiento requerido por el hospital Lluís Alcanyís de Xàtiva, que necesita tener sus silos llenos de agua, ha sido un impedimento para llevar a cabo los planes.

El consistorio está en contacto con el complejo hospitalario para intentar desatascar la actuación cuanto antes, aprovechando que en las últimas semanas se esperaba una reducción importante del consumo de recursos hídricos en el sanatorio al dejar de usarse los sistemas de refrigeración mediante aire acondicionado, con la llegada del frío.

El departamento municipal de Aguas necesita garantizar que la interrupción del suministro desde el canal no vaya a provocar ningún problema relevante y el hospital es una infraestructura clave cuyo funcionamiento óptimo hay que salvaguardar. Se prevé en todo caso que el corte se prolongaría durante varias horas. El problema es que la recuperación del servicio no es inmediata.

La inspección con un dron del principal canal de abastecimiento de agua es una de las iniciativas que el consistorio tiene pendientes desde 2022 para detectar con precisión las fugas que se suceden en su seno y mejorar el funcionamiento de la red de agua potable. Desde el primer momento, una de las principales preocupaciones ha sido asegurar que el Lluís Alcanyís no se queda sin suministro en ningún momento si se agotan las reservas previstas para dotar de autonomía a la infraestructura. "Por el canal pasa una barbaridad de agua, es normal que se deteriore. Tarde o temprano habrá que cortarlo", recalca el regidor de Aguas de Xàtiva, Ignacio Reig.

A contrarreloj para rematar las obras del polígono de l'Estret

Por otra parte, el consistorio de Xàtiva está acabando de rematar las obras de mejora del polígono de l'Estret, financiadas parcialmente con una ayuda del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial de la Generalitat (Ivace), entidad que concedió una subvención de 135.723,78 euros al ayuntamiento. 

Los operarios están trabajando a contrarreloj, puesto que la inversión tiene que estar completamente ejecutada, justificada y pagada antes del 31 de diciembre. Ahora mismo avanza por el 70% en cuanto a nivel de materialización, según calcula el regidor de Urbanismo, Ignacio Reig.

Las obras, adjudicadas por 275.000 euros a la empresa Proena e incluidas en el programa de mejora de infraestructuras en parques empresariales, contemplan mejoras en el alumbrado público, la red de agua potable, zonas verdes, firmes y pavimentos.

El Ayuntamiento de Xàtiva también está trabajando en la aprobación de la última modificación presupuestaria antes de acabar el año -cifrada en unos 500.000 euros- que permitirá aligerar la carga financiera que tendrá que soportar la corporación de cara a 2024.

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