Crece la población dependiente, menor de 15 años y mayor de 64, en las tres comarcas

La tasa de dependencia demográfica se agranda cada año y la población en edad “dependiente” (personas menores de 15 años y mayores de 64) supera ampliamente a la población en edad “productiva”, motivado especialmente por el envejecimiento de la población y el aumento del número de personas mayores, que cada vez alcanzan mayor edad. En la Costera, la Canal de Navarrés y la Vall d’Albaida esta tasa de dependencia demográfica ya supera la mitad de la población y en la última década ha experimentado incrementos destacados, sobre todo en la Canal, donde el aumento se cuantifica en cinco puntos, pasando del 53,18% que representaba en 2013, al 58% al que ha aumentado en 2023. En la Costera la tasa se sitúa a 1 de enero de 2023 en el 51,7%, el menor coeficiente de las tres comarcas, ya que en la Vall d’Albaida alcanza el 53,7%, el mismo dato que registra la tasa en la Comunitat Valenciana. En la Costera, hace diez años se situaba por debajo del umbral del 50%, con una tasa del 49,2%, mientras que en la Vall la población “dependiente” representaba la mitad respecto a la “productiva”, con un 50,1% para la primera, según los datos elaborados y publicados por el Institut Valencià d’Estadística (IVE), a partir de los datos del censo anual de población 2021-2023 del Instituto Nacional de Estadística (INE).

El elevado porcentaje que representa la población mayor de 64 años empuja el aumento de la tasa de dependencia en las tres comarca. En la Canal, la tasa de dependencia de la población de más de 64 años representa en 2023 el 38,8%, frente al 19,1% que registra la tasa de dependencia de la población menor de 16 años. En la Costera, esta diferencia entre los “dependientes” y los “productivos” es menor, con un 21,2% para los primeros y un 30,5 para los mayores de 64 años, mientras que en la Vall la diferencia supera los diez puntos. La tasa de dependencia de la población menor de 16 años es del 21,5% frente al 32,1% de la tasa de mayores de 64 años.

En Xàtiva, la tasa de dependencia demográfica se sitúa en 2023 en el 49,8%, lo que representa que la población en edad “productiva” es aún ligeramente superior a la potencialmente inactiva, aunque va aumentando. El año anterior fue del 49,7% y hace una década la tasa estaba dos puntos por debajo, con un 47,9%. En Ontinyent, el aumento de la tasa en una década alcanza los cuatro puntos y rebasa ya el umbral del 50%. En 2013, la capital de la Vall d’Albaida registraba una tasa de dependencia demográfica del 48,6% y en 2023 es del 52,4%. Enguera supera esta diferencia y en diez años la población “dependiente”, respecto de la “productiva”, se ha incrementado en casi seis puntos, pasando del 46,7 de hace una década al 52,8 que alcanzó el 2023. En esta localidad de la Canal, la tasa de dependencia de la población de más de 64 años representa el 34,8%, frente al 18,1% de los menores de 16 años. En Ontinyent, la diferencia no es tan abultada, con un 30,3% y un 22,1%, respectivamente, mientras que Xàtiva es aún menor, con el 28,4% para los mayores de 64 años y 21,3% para los menores de 16 años.

Repercusión económica

El aumento de la tasa de dependencia demográfica tiene una clara repercusión económica, ya que la población potencialmente inactiva es superior a la potencialmente activa, y cada año la brecha entre los dos sectores poblacionales es mayor, con dominio del grupo de personas en edad “dependiente”.

Localidad con mayor tasa de dependencia

Benicolet acumula la mayor tasa de dependencia demográfica entre las localidades de las tres comarcas, con un índice del 86,4% en 2023. En la localidad de la Vall d’Albaida, la tasa de dependencia de la población mayor de 64 años ya representa el 60,8% frente al 25,6% de los menores de 16 años. En Benicolet, el índice de envejecimiento se sitúa en un 237,3%.

En el lado opuesto, con la menor tasa de dependencia demográfica se encuentra Carrícola, una localidad de apenas un centenar de habitantes (102). En contra de la tendencia actual en los municipios con riesgo de despoblación, donde mayoritariamente la población está más envejecida y los jóvenes se marchan en busca de mejores oportunidades, sobre todo laborales, esta localidad de la Vall d’Albaida registra la menor tasa en los tres territorios, con un 47,1%. En Carrícola, la tasa de dependencia de la población de más de 64 años no llega al 40% (37,1%), aunque la de los menores de 16 años es del 10%.

Tasa de dependencia demográfica por pueblos, en 2023

La tasa de dependencia demográfica en 2023 es de 61,1% en Anna; en Bicorp, 75,1%, en Bolbaite, 63,5%; en Chella, 56,2%; Enguera, 52,8; Millares, 50,4%; Navarrés, 61,5%; Quesa, 56,3%.

Entre los municipios de la Costera, en l’Alcúdia de Crespins se sitúa en el 49,4%; en Barxeta, 60,6%; en Canals, 52,7%; en Cerdà, 49,4%, en Estubeny, 65,2%; en la Font de la Figuera, 60%; en el Genovés, 53%; en la Granja de la Costera, 48,2%; en Xàtiva, 49,8%; en Llocnou d’en Fenollet, 54,7%; en Llanera de Ranes, 54,4%; en la Llosa de Ranes, 51,9%; Moixent, 52,1%; Montesa, 48,8%; Novetlè, 50,8%; en Rotglà i Corberà, 50,6%; en Torrella, 81%; Vallada, 59%; y Vallés, 49%.

En la Vall d’Albaida, Atzeneta d’Albaida alcanza una tasa del 53,6%; Agullent, 50,3%; Albaida, 53,9%; Alfarrasí, 58,9%; Aielo de Malferit, 47,4%; Aielo Rugat, 64,4%; Bèlgida, 57,8%; Bellús, 49,5%; Beniatjar, 64,4%; Benicolet, 86,4%; Benigànim, 49,8%; Benissoda, 49,2%; Benissuera, 70,9%; Bocairent, 63,7%; Bufali, 61,9%; Carrícola, 47,1%; Castelló de Rugat, 52,7%; Quatretonda, 63,1%; Fontanars dels Alforins, 54,5%; Guadasséquies, 54,5%; Llutxent (53,2%); Montaverner, 52,8%; Montitxelvo, 52%; l’Olleria, 53%; Ontinyent, 52,4%; Otos, 73,7%; el Palomar, 49,9%; Pinet, 59,2%; la Pobla del Duc, 58,9%; el Ràfol de Salem, 66,7%; Rugat, 65,4%; Salem, 57,8%; Sempere, 72,2%; y Terrateig, 60%.

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