Agró culpa al Ayuntamiento de la tala «descontrolada e irregular» en la sierra de Enguera

Acció Ecologista-Agró se manifestó este domingo en contra de la gestión del Ayuntamiento de Enguera respecto a la tala «descontrolada e irregular» de 70.000 árboles en la sierra de esta misma localidad. La asociación reclama la supervisión del proyecto al Ayuntamiento y a la Conselleria de Medio Ambiente ante «irregularidades» en las obras que generan «un grave impacto ambiental» y «que han afectado a una pequeña parte de una microrreserva de flora».

Se trata de un proyecto de extracción de biomasa en el paraje de la Umbria-la Plana que ya fue paralizado anteriormente pero que se ha retomado ahora con un contrato que prevé la tala de un máximo de 15.000 toneladas de madera. El Ayuntamiento recibiría 12,71 € por tonelada, es decir, un beneficio de entre 160.000 y 190.000 euros que les pagaría la empresa sevillana adjudicataria de la obra.

Por ley, un 15 % de este capital debe invertirse en cuidados de las zonas taladas, es decir, en trabajos de replantación, poda selectiva, limpieza, accesibilidad para los servicios de extinción en caso de incendio... Fernando García Vila, 2.º teniente de alcalde y concejal de Medio Ambiente y Turismo, explica a Levante-EMV que se aprobó en una junta del Ayuntamiento destinar el 100 % del dinero a estos cuidados.

En contacto con una microrreserva de flora

No obstante, intervenciones de esta magnitud implican el uso de maquinaria grande. Josevi Alamar, miembro de la comisión forestal de AE-Agró, comenta a este diario algunas de las «irregularidades» que han identificado, como el impacto de esta tala en una esquina de la microrreserva de flora Los Altos de Enguera, «por la cual han arrastrado los troncos de los árboles talados, llevándose a su paso otras especies únicas en la zona». Esta alberga algunas especies endémicas que solo se pueden encontrar en la sierra de Enguera, como la Sideritis sericea. El Diario Oficial de la Generalitat Valenciana dice que debe respetarse un radio mínimo de 100 metros alrededor del perímetro de la microrreserva para hacer este tipo de actuaciones.

Además, Alamar afirma que han hablado con los trabajadores encargados de la tala y que estos «no están preparados, no saben diferenciar las especies y actúan antes de que llegue el agente medioambiental». Por ello, la asociación sostiene que el Ayuntamiento «está tolerando el descontrol total de unas talas desmesuradas, injustificadas e insostenibles de las cuales es el promotor y el responsable de que se cumpla la legalidad». Asimismo, asegura que ha contactado tanto con el consistorio como con la Conselleria pero que no ha recibido respuesta.

Ante estas declaraciones, el concejal de Medio Ambiente de Enguera defiende que hay «una serie de circunstancias que los ecologistas desconocen» y que ya trasladó la queja a la Conselleria. En este sentido, García Vila insta a los ecologistas a dirigirse a la administración autonómica porque «es ella quien tiene los medios para controlar y quien denunciaría si viera cualquier anomalía».

De hecho, esta sierra cuenta con tres agentes medioambientales que, en palabras del edil, «conocen perfectamente las zonas de microrreservas y que saben hasta dónde se puede o no llegar». «Nosotros intentamos controlar todo lo que se pueda, pero a pie de obra te das cuenta de que la gente no puede ni pasar y hay que hacer un camino de acceso. Aquí tienes que basarte en el criterio del profesional que marca y ejecuta la obra», añade.

Confusiones en el periodo de autorización

Por otro lado, Agró también destaca que la tala se está realizando «fuera del periodo en el que estaban autorizadas», pero García Vila aclara que, por «una documentación que no era correcta», las obras «no se empezaron cuando tenían que empezar» y por eso se prolongaron. Actualmente, el permiso está en vigor hasta el 30 de septiembre de este año. «Aquí no se corta por cortar, está todo marcado y ordenado. Además, nos encontramos en una terrible sequía que está haciendo que todo esto sea mucho más peligroso», puntualiza el concejal.

Los ecologistas piden a Enguera que paralice las talas "desmesuradas" de árboles

Respecto a la empresa adjudicataria, el edil afirma que han tenido «muchísima suerte por estar vendiendo a 12,71 € la tonelada porque hoy en día eso no te lo paga ningún maderero». No obstante, algunos ecologistas de la zona denuncian la existencia de «posibles intereses» detrás de contratos de esta magnitud y apuestan por realizar esta tarea de limpieza y poda «a menor escala, con intervenciones menos invasivas y con empresas y trabajadores de la comarca, puesto que hoy en día tenemos muchos medios de sustitución de estos macroproyectos». «El consistorio está haciendo otras actuaciones en prevención de incendios muy correctas, pero nosotros optamos por seguir un plan más poco a poco», añaden.

Agró explica que actuará para «sensibilizar a la opinión pública», «paralizar las obras y sancionar a los responsables de esta agresión efectuada contra un valioso patrimonio natural» y sostiene que los «verdaderos propietarios de estos bosques son los habitantes del municipio». El concejal, por su parte, expresa que se les «acusa de talas masivas cuando hay pueblos que hacen lo mismo» y que las declaraciones de Agró le suscitan «desconfianza» y que detrás de ellas hay «motivos políticos».

«Mantener los bosques limpios es el único camino a seguir», manifiesta García Vila. Tanto el edil como algunos ecologistas coinciden en que es «necesario» limpiar y podar los montes, teniendo en cuenta la sequía y sus riesgos de incendio, así como la sobrepoblación de árboles que, en ocasiones, impide el correcto crecimiento de algunos de estos. La diferencia entre sus opiniones, sin embargo, está en cómo se lleve a cabo esta limpieza.

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