Marilyn Borja, Valencia

El grupo Carraixet regresa a la escena musical valenciana con su nuevo trabajo, Guspira, un disco dedicado a Lleonard Giner, co-fundador del grupo y padre de algunos de sus miembros.

Este álbum da protagonismo a la esencia de la música popular, uniendo el carácter reivindicativo del folk y las raíces árabes del repertorio tradicional valenciano, acercándose a la música popular griega. "Es una unión de ritmos mediterráneos, con canciones tradicionales de otros países, pero que hemos hecho muy nuestras", explica Mari Carme Giner, una de las voces de la banda.

Guspira ha supuesto la reaparición del grupo tras ocho años sin publicar material discográfico: "No queríamos actuar sin nuestro padre. Ha sido muy duro trabajar sin él", asegura Mari Carme, muy emocionada. "Y va dedicado a él". Por ello, el disco intercala las canciones con intervenciones de Lleonard: "Queríamos que estuviera muy presente".

Paco Muñoz les ha acogido en su sello discográfico (P.M. Produccions), por lo que le están muy agradecidos: "Estamos muy contentos con el disco porque es combativo y valiente. Tenemos letras maravillosas de Vicent Andrés Estellés, de Toni Mestre, de Rafa Arnal..."

Carraixet nace en 1971 a partir de una rondalla que forma y dirige Giner y que se basa en el repertorio tradicional. Entre sus miembros se encuentra Rafa Arnal, la otra alma del grupo, "que es quien propone a nuestro padre que cantemos en valenciano, impregnando al grupo de un sentimiento nacionalista valenciano", añade.

Según Mari Carme, era tan necesario defender el valenciano en la época franquista como ahora: "El problema viene de arriba, es una lástima que nuestros gobernantes no crean en nuestra lengua y en nuestra cultura". Un problema en el que, aseguran, influye la televisión pública valenciana: "Se supone que es una entidad para impulsar el valenciano. Nos ofrecimos para un acto contra el cáncer y no nos quisieron ni regalados. Mucha campaña a favor del valenciano, pero no se preocupan realmente".

Y es que Carraixet ha salido más veces en Al Jazira que en Canal 9: "Este verano, la escuela oficial de español en Nador nos contrató para cantar allí. Y nuestra actuación se vio en todo el mundo árabe".

Aun así, desde Carraixet aseguran que no quieren hacer un discurso victimista: "La gente nos quiere. Guspira se ha agotado en la Pirámide Musical. Nosotros estamos encantados con lo que hacemos y hemos heredado la persistencia, el optimismo y la ilusión de nuestro padre".

Carraixet siempre ha sido un grupo familiar. "Nos viene de los abuelos, que ya eran músicos", explica Mari Carme. De hecho, la cuarta generación ya se ha estrenado en el mundo artístico: "La música nos ha unido mucho. Nuestros hijos, los nietos de Lleonard, han formado Mini Carraixet. Lo que más nos gustaba de él es el amor a la música y, por eso, lo transmitimos a nuestros hijos. Somos incombustibles, como él. Hemos nacido para estar arriba de un escenario, dando caña. Tenemos mucha ilusión, que es lo que nos hace continuar".