Adela Márquez
valencia
Los amantes de la mítica serie de televisión Star Trek están de enhorabuena. Ya pueden transportarse a la nave "Enterprise" y disfrutar de una exposición que llega por primera vez a Europa, haciendo su primera parada en Valencia. El Museo de las Ciencias Principe Felipe inauguró ayer la muestra Star Trek. Bienvenidos a bordo, que recrea con todo detalle personajes, objetos y escenarios de la serie y de las películas de ciencia ficción que con el paso de los años han demostrado que el mundo que en ellas se intuía, es ahora el mundo real.
Al traspasar la puerta que separa esta exposición del resto del Museo, se accede directamente en la nave en la que transcurren las historias del Capitán Kirk, la Comandante Uhura y compañía, y recibe al visitante un vídeo tributo al creador de la serie, Gene Rodenberry, realizado por sus hijos. A lo largo del recorrido, se puede disfrutar de los auténticos trajes utilizados por los personajes de la serie y de las películas, se puede vivir la sensación de manejar la "Enterprise" con la réplica a escala real diseñada para la exposición o se pueden ver objetos que han sido creados por y para la serie, como tricorders o intercomunicadores. Los guiones de algunos de los capítulos de la serie están repartidos entre elementos como la silla del Capitán Kirk, la silla de transfusión o las maquetas de más de 20 naves espaciales, dos de ellas de gran tamaño. Y para que ningún espectador se sienta perdido, los cuadernos de bitácora de los capitanes de la flota estelar narran la línea temporal de la historia de estos tripulantes del siglo XXIII.
Otra de las características de esta serie es la gran variedad de razas que conviven en ella. Esto tampoco podía faltar en una muestra tan completa de la saga. A través de diversas maquetas se representan las cabezas de muchas de las razas presentes a lo largo de los capítulos, acompañadas por un video en que se explican los complicados procesos de maquillaje requeridos para obtener esos asombrosos resultados.
Star Trek fue galardonada por sus espectaculares efectos especiales, por tanto se hace imprescindible mostrar a los asistentes un vídeo que proporciona información sobre cómo se realizan estos efectos, así como una lista de peculiaridades y curiosas anécdotas sobre los mismos.
La aventura que ofrece esta exposición no acaba aquí. Las emociones están garantizadas con el simulador de vuelo situado en el exterior del Museo, que empezará a funcionar la semana que viene y que trasladará al espectador las sensaciones que tendría si viajara en un trasportador espacial real.
Sólo queda decir, "larga vida y prosperidad".
