Enrique Ponce ha sufrido una fuerte voltereta en la suerte suprema durante el primer toro de la tarde en el Puerto de Santa María. No lleva cornada, pero el primer toro, "Rompeolas" de Juan Pedro Domecq, cogió de manera muy fea por la axila al diestro valenciano tras un primer pinchazo. Según se pudo ver, el torero de Chiva se mostró dolorido en su muñeca y tras un segundo envite, recibió una ovación del público.

Todo ocurrió porque el diestro valenciano optó por entrar a matar en la suerte natural, con el toro apretando hacia los adentros, lo que le costó un aparatoso susto, al ser prendido y zarandeado por el astado de Juan Pedro Domecq en unos instantes en los que sobrevoló la tragedia porque recordó a aquella cornada de marzo del 2014, donde el pitón de aquel Victoriano del Río le rozó la ahorta a Ponce en una extensa cornada en la axila derecha que le llegó al cuello. Finalemte, Ponce se resarció en el cuarto de la tarde tras una faena templada y firma por la que paseó una oreja en la plaza gaditana. El cartel lo completan Morante de la Puebla, que ha cortado una oreja en el segundo de la tarde, y Pablo Aguado, que también ha cortado otro apéndice en el tercero del festejo.

En conjunto, se lidiaron seis toros de Juan Pedro Domecq, de buenas y finas hechuras, y de juego muy desrazado en su mayoría. Alguno resultó manejable y noble, pero todos tuvieron escasa duración y ningún celo, a excepción del tercero, bravo y con entrega hasta el final. Entre las cuadrillas, sobresalieron la brega con el sexto y dos soberbios pares de banderillas al tercero de Iván García, que en este toro saludó junto a Pascual Mellinas.

Al finalizar el paseíllo se guardó un minuto de silencio por las víctimas del Covid en una corrida de toros que era conmemorativa del 140 aniversario de la plaza, con el cartel de "no hay billetes", sobre un aforo de unas 6.000 localidades, reducido en un 50 por ciento como medida de seguridad.