La Comunitat Valenciana en el mapa de la moda sostenible

"Genderless Shirt" reconvirtió las camisas de caballeros con defectos en vestidos de mujer

Emma Sanchis

La tercera edición de Artenblanc de Castelló se celebró el pasado sábado 29 de abril enfocada en la sostenibilidad y acogió uno de los eventos agendados en la Fashion Revolution Week. La docente e investigadora de moda de la EASD Castelló, Alicia Bonillo, coordinó el proyecto "Genderless Shirt" para "hackear" la vida útil de la camisería. La marca Abert Brandom cedió camisas de caballero con defectos de fábrica para que sus alumnas las reconvirtieran en vestidos de mujer.

La performance dirigida por Alicia Bonillo denuncia la cosificación de todos los estereotipos corporales y el "fast fashion" a través del décimo aniversario del hundimiento del Rana Plaza. “Mis alumnas disponían de bustos con sus propias medidas, en la pasarela finalizaron su trabajo de ‘moulage’ encima del maniquí para que el público viera en directo la confección”. Tras este espectáculo, las modelos entraron a la pasarela vestidas con bandanas y culottes de color carne para realzar que incluso en sus tallas socialmente aceptadas cada cuerpo sigue siendo totalmente diferente. Bonillo denuncia que pese a solicitar modelos con tallaje diferente, las modelos que acudieron no eran “curvy”, como ella las describe.

La actuación pretendía mostrar que otra moda futura es posible. Alicia Bonillo asegura que el impacto fue tal que “mi hermano me ha traído pantalones para que pueda utilizarlos en mis clases y les de un segundo uso”. La docente insiste en la importancia de dar visibilidad a estos temas. El aprendizaje de la moda sostenible en las aulas es fundamental, diversos docentes del continente europeo se han sumado a la FRW visualizando documentales y repartiendo materiales disponibles en la web de la asociación.

En València, el Flea Market celebró el domingo 30. Fue una edición especial vintage de precio libre con varias marcas valencianas (Vintage d’Eli o Sekond). Además, Ana Belén Pérez, creadora de @Abintage_ impartió una charla sobre iniciación en moda sostenible como colaboradora del movimiento FR España. Elche se coronó con un cartel repleto de intercambios de ropa, una exposición de moda sostenible, performance o una mesa redonda.

Un movimiento europeo

El movimiento busca principalmente alejar el poder y la culpa de cambio del consumidor y acercarlo a las organizaciones. Por ello, el colofón de la agenda fue el pasado 25 de abril, cuando Fashion Revolution (FR) y la Oficina de Defensa del Comercio Justo organizaron el Día de la Moda Justa en el Parlamento Europeo.

El acto tuvo lugar pocos días antes de la votación de que la Comisión Europea ENVI (Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria) votara la Estrategia Textil de la UE. La jornada consistió en una mesa redonda entre dos eurodiputadas y partes afectadas representadas por Sahin Pravin -antiguo trabajador infantil de la confección de Nepal y Director General de Local Women's Handicraft (Nepal)-, Simone Simonato -fundadora y diseñadora de Sica de una PYME de ‘upcycling’ (Berlín), y Mario Iveković -sindicalista de Croacia-.

El debate fue seguido de un acto público ante el Parlamento Europeo que buscaba demostrar la necesidad de que la UE actuara contra la pobreza salarial en la moda. Para simbolizarlo, los ciudadanos que apoyan la campaña "Ropa buena, salario justo" colocaron a una persona cosiendo a máquina junto a un reloj de arena, “representante del poco tiempo de que dispone la UE para actuar”. Ciudadanos de toda Europa replicaron simultáneamente la acción en espacios públicos concurridos de sus ciudades, demostrando así la solidaridad de toda la UE con las personas que confeccionan la ropa.

"Ropa buena, salario justo" es una Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) que exige una legislación sobre salarios dignos para los trabajadores de la confección de todo el mundo. Quedan menos de tres meses para movilizar el millón de firmas necesarias para pedir a la Comisión Europea que legisle sobre esta importante cuestión.

De momento, la sociedad civil exigió “una mejor legislación en la industria de la moda”, según informa FR. La revisión legislativa demandaba que las marcas “rindieran cuentas por sus impactos en los derechos humanos y el medio ambiente”, así como “emprender acciones legales contra las prácticas de compra irresponsables de las marcas”. El 27 de abril se consiguió que se votara a favor de la revisión.

La Comisión ENVI del Parlamento Europeo por la Armonización de Sistemas se centrará en establecimiento de sistemas armonizados de RAP (Responsabilidad Ampliada del Productor). El RAP traslada a los fabricantes el coste de la gestión de los residuos que generarán los productos que ponen en el mercado. Es un concepto acuñado en la política de la Unión Europea que se resume con el principio de “quién contamina paga”. Sin embargo, la Confederación Europea de Industrias del Reciclaje (EuRIC) advierte que el reciclado no se incluye entre las operaciones que deberían beneficiarse de las contribuciones del RAP.

La presidenta del EuRIC Textiles, Mariska Boer, expresó su satisfacción al ver en el informe “la inclusión de fibra reciclada en los nuevos productos textiles”, pero insiste en que “estas fibras deben proceder de textiles postconsumo”. Boer señaló: “Las medidas cuentan con el apoyo de la industria Europea de la reutilización y el reciclado de productos textiles y ayudarán a toda la cadena de valor textil a avanzar hacia una economía más circular”.

La FRW ha culminado con grandes logros que se extienden en el tiempo con la creación de una sororidad en la industria de la moda propuesta por este movimiento internacional.