La familia de Sandra Valero: «Es un orgullo y se te pone la piel de gallina al ver a tu hija actuar en Eurovisión Junior»

«El resultado es excelente, lo vivimos con mucha pasión y nervios, es algo que con palabras no se puede describir ni explicar, hay que vivirlo, sentirlo, estar ahí... Es muy emocionante ver a tu hija, se te pone la piel de gallina de verlos cómo se desenvuelven en un escenario tan grande y ellos tan pequeños».

Así explica Antoni Valero cómo vivió la familia la actuación de Sandra Valero, la valenciana de 12 años que representó a España en Eurovisión Junior y bordó una actuación que le mereció el segundo puesto, este domingo, solo superada por Francia.

Ayer, la delegación española volvió a casa —Sandra y su equipo atendieron algunos compromisos— y la familia de la cantante seguía en una nube desde la actuación de Niza. «Los cinco son unos pedazos de artistas», dice el padre de la cantante sobre ella y los bailarines que la acompañaron en el Palais de Nikaïa: Marcos Pelado, Juan Diego Álvarez, Evelyn Casteñada y Elia Cobo.

« Llevo 32 años en el mundo de la música y enfrentarse a los escenarios es muy duro, pero ellos lo hacen de una manera tan natural y con tanta facilidad que es asombroso», reconoce el padre a Levante-EMV. Él estuvo una semana en Niza y su mujer, Nazha Azizi, llegó unos días antes de la actuación. También vivió el directo una prima, un tío... y una veintena de amigos que se desplazaron hasta Francia.Aquí, la final se siguió el domingo desde Benetússer, de donde es vecina Sandra Valero.

Sobre el resultado, que dejó a España como subcampeona (mejor puesto desde que María Isabel ganara hace 19 años), el entorno de la joven intérprete se muestra satisfecho y aseguran que ella también lo siente así. «No hizo falta que nos dijera nada, el abrazo que nos dio lo contestó todo; es como si hubiera ganado, la sensación es de estar muy satisfecha del trabajo y de los compañeros, están encantados de la vida, en la party posterior era la más feliz, y dice que no está cansada».

Y eso porque es una niña llena de energía e ilusión, porque su padre reconoce que lleva semanas sin parar. «Llevaban números de bordarlo porque han trabajado muy bien, han ido a full, cada ensayo era mejor, y la semana de Niza los ensayos ya eran actualizaciones», recuerda.

¿El único rival? Superarse

«Mi consejo siempre ha sido que ella no compite contra nadie, sino contra ella misma y si lo hace mejor que el día anterior, ya está... no tiene rivales a su lado a los que tenga que ganar y así le va muy bien, porque se olvida de que es una competición y así actúa, canta, disfruta y lo vive», dice el padre.  

La familia reconoce que todo ha sido «muy intenso» y ha pasado «muy deprisa», mientras no paran de llegar los mensajes de felicitación y el feedback de sus conocidos. Ya tendrán tiempo para disfrutar lo vivido; de momento, Sandra Valero —que había pasado por La Voz e Idol Kids— tiene algún compromiso comercial en agenda pero, sobre todo, desea volver a hacer bolos con su compañía teatral. 

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