El Institut de Cultura inicia nueva etapa con direcciones adjuntas pero sin responsable principal

El pleno del Consell tiene previsto aprobar este martes el nombramiento de los tres nuevos directores adjuntos del Institut Valencià de Cultura elegidos tras un proceso de selección por la conselleria de Cultura: Joan Josep Cerveró (Música y Cultura Popular), María José Mora (Artes Escénicas) y María Fuster (Audiovisuales y Cinematografía). 

¿Supondrán estos nombramientos la ansiada estabilidad en el principal organismo cultural de la Generalitat tras la renovación impulsada desde octubre por el conseller Vicente Barrera(Vox) y su secretaria autonómica Paula Añó? 

Cesado el 16 de febrero

De momento, parece que no. La llegada de los nuevos adjuntos a la dirección tiene lugar justo cuando el IVC se queda sin director ya que este fin de semana concluía la etapa de Abel Guarinos al frente del organismo. 

Guarinos fue cesado el pasado 16 de febrero -un mes después de que fuesen destituidos sus directores adjuntos- y la intención de la conselleria -al menos así lo hizo saber el departamento gestionado por Vox- era aprobar esa misma semana las bases del proceso público que regirían el concurso público para encontrar a su sustituto. El hasta ahora director del IVC había seguido ejerciendo sus funciones de forma interina hasta el pasado domingo.

«Buques» culturales sin director titular

El Institut -que es el organismo autónomo de la conselleria de Cultura que más presupuesto maneja- se suma ahora a la lista de «buques insignia» culturales gestionados por Vox en la Comunitat Valenciana que van a funcionar provisionalmente sin dirección principal. 

El primero fue el Consorci de Museus, para el que, una vez destituido José Luis Pérez Pont, la conselleria encontró pronto un gerente (Nicolás Bugeda) pero no un responsable artístico. Y después ha sido el IVAM, para el que ni se ha nombrado aún un gerente (el proceso se ha tenido que retrasar en varias ocasiones desde el verano pasado) ni se ha iniciado el procedimiento para sustituir a Nuria Enguita tras su dimisión hace dos semanas como directora artística. El puesto lo ocupa provisionalmente Sonia Martínez. 

En el caso del IVC, fuentes de la conselleria explicaron ayer a Levante-EMV que, así como Guarinos se ha hecho cargo de las labores propias de sus adjuntos mientras estas plazas han estado sin ocupar -es decir, desde el pasado 15 de enero-, serán los nuevos adjuntos los que asuman las funciones del director hasta que el Consell apruebe el nuevo cargo. 

Un día sin responsabilidades

Para ello, claro, primero habrá que iniciar y concluir el proceso público de selección que iba a empezar hace dos semanas y que todavía no se ha iniciado. Las mismas fuentes de la conselleria aseguran que las bases están «a punto» de publicarse, con lo que el proceso debería iniciarse en los próximos días.  

Así las cosas, ayer lunes se vivió una situación bastante inusual en el IVC ya que no tuvo ni director ni directores adjuntos. El nombramiento de Cerveró, Mora y Fuster no se hará efectivo hasta que el Diari Oficial de la Generalitat publique la aprobación de hoy por parte del pleno del Consell. Eso sí, lo podrá hacer de forma retroactiva, con lo cual los nuevos adjuntos podría empezar a trabajar hoy mismo.

Reunión de coordinación

De hecho, ayer los nuevos responsables de las áreas de Música, Artes Escénicas y Audiovisuales del IVC participaron en una reunión de «coordinación y revisión» con la secretaria autonómica, Paula Añó, y el director general de Cultura, Sergio Arlandis. Guarinos ya no participó en esta reunión.

Y hoy Mora participará junto a Arlandis en la presentación de la nueva edición de Dansa València, festival del que sigue siendo directora la nueva adjunta de Artes Escénicas. La conselleria explicó ayer que Mora seguirá por ahora asumiendo esta responsabilidad ya que el certamen dedicado a la danza se integra en su área de gestión en el IVC. 

El Síndic insta a que el IVC use más el valenciano

Por otra parte, el Síndic de Greuges insta al Institut Valencià de Cultura (IVC) a adoptar «todas las medidas que sean necesarias, incluidas las presupuestarias y tecnológicas, para garantizar el derecho de la ciudadanía a dirigirse y a obtener respuesta de la entidad autonómica en cualquier de las dos lenguas oficiales, castellano y valenciano, y a recibir respuesta en la misma lengua utilizada».

Así figura en una resolución del defensor del pueblo valenciano en la que, además, deja constancia de la «falta de la colaboración» del organismo, al que se solicitó un informe sobre el asunto en el plazo de un mes sin obtener respuesta. Esta resolución de cierre viene motivada por la queja interpuesta el pasado mas de agosto por el fundador de Acicom y actual presidente de honor de la asociación, Jose Ignacio Pastor, sobre que el IVC «no respeta el valenciano».

Pastor denunciaba que «en la última convocatoria de ayudas audiovisuales, la mayor parte de la documentación no contemplaba la versión en valenciano, obligando a utilizar unos modelos únicamente redactados en castellano y, por lo tanto, obligando a las entidades solicitantes a no poder utilizar el valenciano o hacerlo con problemas».

Acicom califica de «inadmisible» el comportamiento del IVC, «una entidad que tendría que ser ejemplo en la promoción y defensa del valenciano» y pide que se «implementen las medidas necesarias para corregir los hechos denunciados».

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