El expresidente del Valencia Francisco Roig remitió este jueves una carta al máximo accionista del club, Peter Lim, en la que le pide que haga un equipo competitivo para instalarse entre los grandes de Europa como única forma de hacer rentable su importante inversión en la entidad.

En la misiva, el que fuera presidente del Valencia a mediados de la década de los noventa del pasado siglo, recuerda al Lim que los aficionados «se movilizaron y aplaudieron su llegada para terminar con la política de venta como única solución» y agrega que hoy se preguntan por qué tienen que ver cómo les adelantan equipos que «tradicionalmente estaban por detrás como el Atlético de Madrid, Sevilla o Villarreal».

En esa línea, Paco Roig compara la política actual de ventas con la que «institucionalizó -el expresidente- Manuel Llorente de venderlo todo para salvar las cuentas» y que considera que no debe ser ahora el camino. «Yo le pido, Sr. Lim, que no coja ese camino porque ese es el que llevará al Club a la ruina y a usted a fracasar en su proyecto. Le pido que entienda que la única manera de hacer grande al Valencia y, de paso, hacer rentable su importante inversión es hacer un equipo competitivo que se instale entre los grandes de Europa», insiste el exdirigente del club de Mestalla.

«Sólo así podrá garantizar los ingresos necesarios para seguir creciendo y recuperar el beneplácito de una afición que sólo desea ver a su equipo en lo más alto. La experiencia reciente debería hacerle ver que cuando se ha rodeado de profesionales del fútbol competentes el equipo ha estado arriba. Ése es el camino y no otro. Empréndalo de nuevo y verá como son muchísimos los seguidores del Valencia dispuestos a caminarlo con usted», agrega.

De su etapa como presidente, Roig recuerda que cuando llegó al Valencia «la caja estaba vacía», pero tenía claro que el valencianismo quería un equipo competitivo. «Llegamos a construir un equipo que llegó muy lejos. Comprábamos jugadores que luego vendíamos a buen precio pero siempre para volver a invertir en el equipo y tuvimos entrenadores de primerísima línea como Luís Aragonés o Claudio Ranieri», recordó. También reconoce que en el su etapa al frente de la entidad se equivocó «en muchas cosas» pero que su «obsesión» fue siempre tener un equipo campeón y que le duele «en el alma» ver un club cada vez más debilitado. Roig deja claro que más de veinte años después de dejar la presidencia, no tiene más aspiración que la de ejercer sus derechos como accionista del Valencia. Asimismo, asegura a Lim la gente de Valencia es de paz y que le apena profundamente ver que el presidente Anil Murthy va acompañado por un guardaespaldas, «algo que no le hace ninguna falta». En Valencia, «ni somos violentos ni somos racistas: aquí hemos aplaudido a rabiar a Waldo, Keita, Madjer, Anglomá y a muchos otros sin mirar su nacionalidad, sus creencias religiosas ni el color de su piel. No permita, Sr. Lim, que nadie les engañe», dijo. «El Valencia hay que sentirlo y entender que la aspiración del valencianista es tener un equipo del que sentirse orgulloso», indica Roig, que también pide a Lim que no se enfrente al valencianismo. «Póngase a su lado y escúchelo porque el valencianista siempre sabe agradecer todos aquellos esfuerzos que vayan dirigidos a hacer al Club cada día más grande», agregó.