Agatha Ruiz de la Prada presentó en el marco de la feria Cersaie, que se celebró la pasada semana en la ciudad italiana de Bolonia, su nueva colección para la marca Pamesa. Se trata de Agatha 21, una propuesta que puede ser calificada como una explosión de color en la que destacan los diseños caracterizados por efectos de confetti, colores empolvados y de tendencia, geometrías y brillos.

Agatha 21 es un conjunto de diseños que conectan con una visión alegre y naïf del mundo; un movimiento divertido y colorista que retoma el espíritu de la infancia con un punto sofisticado. Hexágonos, corazones, estrellas, líneas y un patrón muy particular a base de flores provenzales son los elementos principales de esta nueva y singular propuesta cerámica de la prestigiosa y popular diseñadora madrileña.

Agatha Ruiz de la Prada ha manifestado en numerosas ocasiones que «aporto color al mundo de la cerámica» y asegura que, en su evolución como diseñadora de revestimientos cerámicos ha conseguido que sus colecciones sean cada vez cada vez «más agathizantes». Eso sí, lamenta que el proceso de crear una colección de baldosa, al contrario de lo que pasa con la moda, «sea tan laborioso, tan pesado…» Y tan complejo porque ella quiere diseñar suelos, y los técnicos de Pamesa le han advertido que el color, bajo los zapatos, no resiste tan bien como en las paredes. «Yo he hecho paredes muy bonitas, pero todavía no he hecho el suelo que yo quiero hacer», dijo.