La Bolsa de Shanghai ha decidido suspender la cotización de Cosco Shipping Co., holding que aglutina los negocios de la gigantesca corporación de propiedad estatal china dedicada a los negocios del transporte y la logística marítima, hasta aclarar su reestructuración de activos. La empresa cotizada «no puede reanudar la actividad comercial según lo programado», indica en un comunicado el grupo que recientemente ha anunciado su desembarco en el Puerto de València al comprar el 51 % de Noatum Ports, compañía que gestiona la principal terminal de contenedores del recinto del Grao, entre otras instalaciones.
En medio del proceso de integración de varias sociedades, China Ocean Shipping Company todavía atraviesa «grandes incertidumbres en relación a asuntos relacionados con la reestructuración de activos materiales», indica la agencia Reuters. La negociación de acciones tiene previsto estar suspendida desde del 19 de junio de 2017, aunque no durará más de un mes, clarifica el organismo regulador de las empresas cotizadas del citado mercado asiático.
La matriz de la sociedad que ha comprado Noatum Ports -una filial dedicada a la explotación de terminales de contenedores en puertos y recintos ferroviarios- ha acometido en los últimos dos años importantes operaciones corporativas, como la fusión con la naviera China Shipping (CSCL). Además, ha comprado recientemente el 67 % de los títulos del puerto del Pireo (Grecia), el más importante del país y que junto con el de València le darán una posición de liderazgo en el tráfico de contenedores en el Mediterráneo. El operador apuesta por incrementar su capacidad actual de 1.580.000 millones de TEU hasta los dos millones en 2018, un 25% más en sólo tres años. Controlará 210 buques.
Proceso de concentración
Cosco -cuarta naviera del mundo por volumen de actividad- no escapa del proceso de fusiones y alianzas entre empresas del sector para intentar abaratar costes y mejorar su eficiencia operativa en los puertos. Además, la compañía también está soportando una elevada deuda como consecuencia de sus pedidos de megabuques, fabricados en los principales astilleros del sudeste asiático.
Cosco llegó un acuerdo con el banco de inversión JP Morgan para comprar el citado porcentaje de Noatum Ports -por el que pagó 203 millones de euros- y que incluye las terminales de contenedores que la compañía posee en Valencia (Noatum Container Terminal Valencia), Bilbao (Noatum Container Terminal Bilbao), así como las estaciones intermodales de transporte de contenedores Conterail -en el Puerto Seco de Madrid- y Noatum Rail Terminal Zaragoza.
Según fuentes de Noatum, la operación «está sujeta a la aprobación de accionistas, al cumplimiento de ciertas condiciones previas y a la obtención de las autorizaciones legales pertinentes».
Noatum Container Terminal Bilbao y Valencia, como terminales públicas, seguirán ofreciendo sus infraestructuras y gama de servicios a todas las navieras que hagan escala en los puertos de Bilbao y Valencia respectivamente, en condiciones de neutralidad y con arreglo a las condiciones de concesión y los compromisos contractuales. Lo mismo se aplicará para los puertos secos.
