El consejo de administración de TiL-MSC, la multinacional que gestiona grandes terminales portuarias en todo el mundo y está participada por la naviera Mediterranean Shipping Company, ya ha dado el visto bueno al proyecto de construcción y gestión de la nueva terminal de contenedores tras los cambios introducidos por la Autoridad Portuaria de València (APV). TiL-MSC, cuyos máximos accionistas se reunieron el pasado miércoles, confirma que «sigue adelante», según indicaron a Levante-EMV fuentes oficiales de la compañía.

La entidad presidida por Aurelio Martínez concedió a finales de 2020 un plazo de tiempo de cuatro meses a la multinacional TiL-MSC para que analizara los cambios en el anteproyecto de construcción y explotación de la nueva terminal de contenedores en la ampliación norte del recinto del Grao. La infraestructura propuesta por la APV, tras análisis técnicos de este último año para reducir su impacto sobre el territorio, renuncia a prolongar en 500 metros la extensión del dique de abrigo mientras que el dragado del canal marítimo de acceso para los buques quedará en 18,5 metros, frente a los casi 22 metros calculados inicialmente.

A la espera del consejo de la APV

TiL-MSC se pronuncia así favorablemente sobre esa modificación sustancial de la obra planificada por Valenciaport y que quiere acabar en 2026 o 2027 para poder albergar un muelle con capacidad para otros 5 millones de contenedores en 136 hectáreas de superficie

El presidente de la Autoridad Portuaria de València (APV), Aurelio Martínez, reconoció que la demora en el otorgamiento de dicha concesión es «un nuevo retraso más aunque no pasa nada. Ya nos dijo la compañía el pasado mes de julio de 2020 que quería estudiar las modificaciones del dique de abrigo y del canal de acceso». La naviera MSC, presidida en España por Francisco Lorente, espera que el Puerto de València adjudique en breve esta infraestructura, en la que invertirá unos 1.100 millones de euros.