AGRICULTURA

La cosecha de cítricos caerá un 20% y la de arroz un 38% este año tras la sequía primaveral

Las tormentas de lluvias de estos días mitigarán el desplome de producción en los principales cultivos mediterráneos, incluida la producción de aceite, que será un 55% menor, según las previsiones del Ministerio de Agricultura

Producción de aceite en una almazara de Elx, en una imagen de archivo.

Producción de aceite en una almazara de Elx, en una imagen de archivo. / AXEL ALVAREZ

José Luis Zaragozá

José Luis Zaragozá

Más allá de las intensas precipitaciones que estos días inundan algunas comarcas de la Comunitat Valenciana, la persistente sequía que esta primavera viene azotando al campo tendrá una notable impacto en la cosechas de tres de los cultivos mediterráneos más característicos: cítricos, arroz y aceite. Según la última previsión del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), la cosecha de naranjas podría reducirse a 2,868 millones de toneladas en 2023 en el conjunto de España (aquí deben incluirse algunos territorios como Andalucía, Murcia y Cataluña), lo que supone un desplome del 19,6% en comparación con la campaña anterior. También la de limones (concentrada sobre todo en Alicante y Murcia) se reducirá a 865.100 toneladas, un 17% menos.

Tal como vienen advirtiendo las organizaciones agrarias, el período más seco de la historia reciente dejará consecuencias nefastas en el campo. Más allá de los cítricos, los productos más afectados, según el informe realizado por el Ministerio de Agricultura, son el aceite, con descensos de algo más del 55% de su producción en comparación con el año pasado, así como el arroz, con caídas de casi el 40% . Por otro lado, la aceituna destinada a las almazaras, es decir, a la producción de aceite, también sería una de las grandes perjudicadas por la falta de agua de cara a la campaña, pues su producción descendería un 52%. Por otro lado, las verduras y hortalizas tampoco se libran de la sequía. De este modo, la producción de tomate se reducirá un 8,7% y la de alcachofa, un 4% a lo largo de este año.

Campos de Arroz cerca de l'Albufera.

Campos de Arroz cerca de l'Albufera. / © ABELARD COMES

Pendientes de la intensidad de las lluvias

Las pérdidas de cereales, cuyas explotaciones se concentran en comarcas del interior de la C. Valenciana, ascenderían al 85% para la campaña de 2022/2023, quedando una cosecha entre 2,5 a 3 millones de toneladas en toda España, si bien esa situación se podría mitigar con las lluvias de estos últimos días. Mientras tanto, el Ministerio de Agricultura prevé un crecimiento de la producción de cereales de otoño-invierno del 8,5%. Así, la cebada de variedades más tardías elevará su producción un 10,5% y el trigo un 5,5%, por ejemplo.

A la vista de la situación las organizaciones agrarias reclaman un apoyo decidido al regadío y especialmente a los agricultores y entidades de riego que emplean aguas subterráneas, puesto que han empezado a regar tres meses antes que el año pasado y han aumentado un 40% el consumo de agua. Insisten en reclamar un precio especial para el kilowatio/agrario, permitir de manera indefinida dos cambios de potencia contratada al año y eliminar el tope del gas en el sector agrario.

'Collidor' en un campo de Nules, en una imagen de archivo.

'Collidor' en un campo de Nules, en una imagen de archivo. / MANOLO NEBOT ROCHERA

En busca de ayudas

El ministro de Agricultura, Luis Planas, solicitó ayer a las comunidades autónomas información precisa sobre los cultivos para repartir las ayudas directas a los agricultores por la sequía. Planas expuso a los consejeros el último paquete de medidas del Gobierno para apoyar al sector primario, de más de 784 millones de euros, de los que 636 millones son ayudas directas. AVA-Asaja valora las ayudas directas dirigidas a los ganaderos y apicultores, pero cuestiona el fondo de 276 millones que el Gobierno aún no ha desvelado a qué cultivos y en qué zonas de España los destinará. Respecto al aumento de la subvención del coste de las pólizas por riesgo de sequía en cultivos de secano, podrá beneficiar a las producciones que tienen una cultura de contratación porque el seguro funciona bien, como son los casos de la uva para vinificación y los cereales, pero, por el contrario, tendrá una incidencia mínima en otros como el almendro y el olivar donde apenas se contrata esta cobertura porque no se ajusta a las necesidades reales del cultivo.

También la Unió Llauradora alerta de que la falta de lluvias amenaza "seriamente" ya algunos cultivos en la Comunitat Valenciana, con especial incidencia "de forma inmediata" para los cereales, que no han germinado en la mayor parte de los casos desde la siembra y se encuentran ya en una situación dramática, según advierte la organización agraria liderada por Carles Peris .

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