El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García Margallo, ha cerrado la puerta este martes a un referéndum pactado y ha apostado por "buscar una fórmula" que permita a Cataluña "encajar" en España a través de una reforma de la organización territorial del país respetando siempre la unidad de España y una revisión del modelo de financiación.

Durante su intervención en un desayuno informativo en el Forum Europa, Margallo ha dejado claro que "no es posible un referéndum pactado" en Cataluña y sólo podría optar por una declaración unilateral de independencia, lo que a la vez supondría su salida inmediata de la Unión Europea. "El 'adeu' a España es el 'adeu' a la Unión Europea", ha advertido.

El ministro ha insistido en que un referéndum pactado no es posible en la Constitución Española ni en ninguna de las demás constituciones "presentes y pretéritas", sólo en Reino Unido porque allí "no hay un ordenamiento constitucional escrito". "Queda claro que no cabe una secesión pactada, sería una declaración unilateral de independencia que tendría consecuencias gravísimas para España y también para Cataluña", ha insistido.

Y además, ha recordado que según el tratado europeo, cualquier territorio que se escinda de un estado miembro queda excluido "automáticamente" de la Unión Europea. En este punto se ha referido a la situación de Kosovo, para el que cinco estados miembros se oponen a su entrada en la UE y se ha mostrado seguro de que serían "muchas más" los estados miembros que no apoyarían la entrada de un territorio secesionado unilateralmente.

"Cerrado ese camino", el ministro ha abogado por buscar una fórmula que permita a Cataluña "encajar" en España y ha apuntado a la organización territorial del Estado, que "probablemente" deba ser revisada porque se estableció en una Constitución del año 1977 en la que con el Título VIII se marcó "un camino hacia la autonomía que ya ha culminado", en un momento además en el que España no pertenecía a la UE.

"Probablemente haya que revisar a la luz de las circunstancias cambiantes cuál es la organización territorial respetando siempre el artículo 2 de la Constitución", ha concedido Margallo en alusión al artículo que establece la "indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles".

Y además de esta revisión, que el ministro considera que podría hacerse con un método "relativamente sencillo si se quiere", ha puesto sobre la mesa la necesidad de revisar el sistema fiscal español, que está "anclado" en el año 1977 y sus principios "se han quedado viejos".

"Una vez que se cambie el sistema fiscal hay que encajar los sistemas de financiación de todos los actores de la vida pública: la administración central, las comunidades autónomas las corporaciones locales y la Seguridad Social", ha sostenido señalando la necesidad de contemplar todas las figuras impositivas y también aquellas no impositivas "como los precios públicos que sirven para racionalizar la demanda".

De esta forma, ha insistido en las consecuencias que tendría tanto para España como para Cataluña su división y ha apuntado que se debe explicar que "esa vía no conduce a ningún sitio" y "buscar una vía alternativa que satisfaga las necesidades y deseo de los catalanes para acabar con el clima de desafección de aquellos que lo sienten". "Eso es relativamente sencillo", ha insistido apuntado aspectos como las infraestructuras, la lengua, la cultura y la financiación.

En este contexto, se ha referido a los actos de celebración de la Diada y ha señalado que la cadena humana prevista es una "manifestación clara" de que en España existe libertad de expresión, lo que también cierra la puerta a ejercer el derecho de autodeterminación por vulneración de los derechos humanos.