El colectivo Falles del Carme anunció hace un par de semanas que estaban dispuesto a aprovechar su privilegiada situación en la ciudad y sus especiales características como comisiones para crear una verdadera marca de calidad. Y para el ejercicio 16-17 anunciaban ayer la primera tanda de actividades, que empezarán con una muy relacionada con la próxima festividad de la ciudad, la de Todos los Santos.

Siguiendo una costumbre que se pierde en la noche de los tiempos, Don Juan Tenorio volverá a representarse precisamente aprovechando la oscuridad, pero la correspondiente a la Noche de Difuntos. Pero con una particularidad muy especial: se escenificarán pasajes de la obra de Zorrilla de forma sucesiva en diferentes zonas del barrio. Así, entre las sombras, las calles sinuosas y el propio ambiente de una víspera de festivo se pretende garantizar el clima a la vez romántico y tétrico al uso. Que, además, no deja de ser una forma de desafiar las nuevas modas de la fiesta de Halloween „con la que, indudablemente, se cruzará en algún momento„.

Los actores son miembros de estas fallas y bajo la dirección de Mario Gumbau, se irán desplazando por los diferentes emplazamientos. La primera escena, «Hostería de Laurel» empezará a medianoche en el restaurante donde está la antigua Casa Insa (en la calle Baja). Los actores se desplazarán a los siguientes emplazamientos (Casa de Ana Pantoja en Landerer, Refugio de la calle Sogueros, Jardín de la Plaza del Carmen e Iglesia de la Plaza del Carmen) acompañados por una procesión de antorchas.

Jaime y Jessica, Juan e Inés

Jaime Argente y Jessica Miró serán los encargados de representar a Don Juan y Doña Inés y ya se ha ensayado en plena calle. «Vistas las pruebas, sólo puedo decir que la idea es excepcional. Quien venga va a vivir una experiencia muy especial» decía Jaime Argente.

No será la única actividad que realizará Falles del Carme, una combinación que resulta de las fallas que componen la Agrupación más las dos que no lo están (Corona y Blanquerías) y que ya dieron el primer pasó con la celebración de un «Mig Any» conjunto. La presentación de proyectos la realizarán en el Mercado de Mosen Sorell durante tres días e incluirá un debate sobre las presentaciones de falla. Otra de las novedades turísticas será la creación de la «Carmesina», una pasaporte acuñable para visitar las fallas del barrio, con su habitual y entrañable heterogeneidad artística.