El Extra de Fallas ya está en marcha. La revista, que verá la luz el próximo 9 de marzo, divide sus contenidos en función a la heterogéneidad de la propia fiesta. Reportajes e informaciones para todos los gustos.

Pero si hay uno que marca tendencia, es el que tiene a las embajadoras de la fiesta como protagonistas. Y la apuesta en los últimos años se ha multiplicado con el más ambicioso proyecto auspiciado por Levante-EMV.

Coincidiendo con la declaración de las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, este diario ha apostado por realizar con las falleras mayores de València diferentes viajes a lugares del mundo para fusionar su imagen con entornos especiales. Compomiendo imágenes inéditas hasta ahora.

Alicia Moreno y Sofía Soler en París; Raquel Alario y Clara Parejo en Venecia; Rocío Gil y Daniela Gómez en Londres. Torres, castillos, góndolas, museos, iglesias, palacios famosos en todo el mundo.

Y en 2019 es el turno de Marina Civera y Sara Larrazábal para completar este círculo.

Es un reportaje que se convierte en un recuerdo imborrable para ellas, pero también en un motivo de satisfacción para aquellos que quieren ver a las Fallas trascendiendo de sus propias fronteras. Llega un momento en que hay que "romper el cascarón" y después de haber trillado, en las décadas anteriores, todo tipo de entornos de la ciudad o incluso de haber viajado por la Comunitat Valenciana, ahora hay que engrandecer fronteras porque la fiesta también precisa de esa amplitud de miras. Y nadie como sus embajadoras.

Y como ya lleva varios años celebrándose, conocer el destino tiene su dosis de intriga. Después de varias semanas de incertidumbre y de muchaspreguntas, Marina y Sara conocieron por fin el escenario mundial de su reportaje. No es una "ceremonia", pero si tiene su pequeña dosis de ritual.

Como si de una entrega de premios se tratara, la ciudad de destino estaba dentro de un sobre, que se encargaron de abrir.

La reacción es la que enseñan las imágenes. A partir de ahí, el siguiente paso: preparar las maletas.