El vicealcalde Sergi Campillo dijo el viernes que «no se pueden tirar petardos estos días porque estos días no son de Fallas». El concejal de Cultura Festiva, Carlos Galiana, aseguró la pasada semana que sí que podrían tirar, textualmente, «chinos y bombetas». Piroval salió asegurando que hay muchos más artículos que no superan los 90 decibelios que son, en tal caso, el límite permitido. Sagunt edita un bando por el que permite, hasta el día 19, «el material pirotécnico de libre venta en los establecimientos abiertos al público y autorizados a la venta al por menor».

Las tiendas siguen vendiendo material pirotécnico de todo tipo -porque una cosa es la venta y la actividad económica, que está autorizada y otra es el empleo del mismo- y, mientras tanto, se mantiene una cierta ceremonia de la confusión que el sector pirotécnico considera que debe cortarse de raíz con una medida: establecer negro sobre blanco qué hacer con la pirotecnia en estos días en la vía pública.

La gran confusión con la pirotecnia

Las venta al detalle de material pirotécnico es un recurso complementario a los eventos y también hay firmas especializadas en esta venta. La cual está plenamente autorizada porque, tal como explica el responsable de la firma Platón -propietaria de las tiendas Pyroshopping- «es una actividad económica. Nosotros podemos vender cualquier tipo de pirotecnia en cualquier momento del año. La otra cuestión es dónde y cómo se emplea, para lo que existen las instrucciones pertinentes». Albiñana es uno de los que reclaman «algo tan sencillo como que se diga lo que se puede hacer» para evitar las paradojas y las dudas.

La gran confusión con la pirotecnia

«Por ejemplo: si hacemos caso a uno, ni bombetas se podrían disparar. Si hacemos caso a otro, no sólo se pueden comprar chinos y bombetas porque la pirotecnia va por catalogaciones, no por artículos». Piroval señalaba todas las categorías no profesionales como susceptibles de ser vendidas si nos atenemos a no rebasar los 90 decibelios. Albiñana, por ejemplo, cree que podría haber un término medio. «No sé: por ejemplo, autorizar las F2 y F1». Artículos de baja y muy baja peligrosidad y ruido, respectivamente. «Al final, el problema no es tirar, sino cómo tirar.».