Los casales falleros y el resto de sedes de la entidades festivas de la Comunitat Valenciana reabrieron ayer, en horario de mañana y tarde -de 10 a 13 horas y de 16 a 20 horas-, tras relajarse en parte las restricciones impuestas por la Generalitat Valenciana, para evitar aglomeraciones por el coronavirus.
La apertura de las sedes festivas es una reivindicación que han planteado las fallas en las últimas semanas porque les permitirá desbloquear parte de la labor administrativa que tienen que hacer las comisiones para organizar el nuevo ejercicio festero.
Ayer en el casal de Convento-Jerusalén dos falleros trabajaban en labores de oficina desde las 17 horas, respondiendo e-mails y poniéndose al día con el papeleo de la oficina.
En Na Jornada, una componente de la falla hacía tareas administrativas y su compañero se encargaba de la lotería. Una vecina de Vilamarxant aprovechó que se volvía a abrir el casal para cobrar sus papeletas premiadas: 180 euros que le vendrán de perlas.
Por su parte, el vicepresidente de Duque de Gaeta-Pobla de Farnals Javier García señalaba que la apertura de las sedes festeras se aprovecharán para realizar «toda la burocracia que requiere el inicio del ejercicio festero», que arranca ahora con el fin de las No Fallas 2021. «Al menos ahora el presidente puede reunirse con la secretaria o la tesorera para ir preparando el presupuesto y para ir controlando las bajas que pueda haber, los cambios de cuota o domiciliaciones o el paso de infantiles a mayores, por ejemplo», apuntaba García.
Tal como especifica el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana, los casales y las sedes de entidades como las hermandades de la Semana Santa o de las comparsas de Moros y Cristianos «en ningún caso estarán abiertas al público» y sólo podrán abrir «para la realización de actividades de gestión y administración». El aforo máximo para la realización de estas actividades es de cuatro personas y se ha levantado la persiana para hacer gestiones como pagar cuotas o loterías, que en persona se pueden realizar de manera más ágil que telemáticamente. La plasmación de esta norma permite a las comisiones de falla empezar la puesta en marcha del ejercicio fallero y la liquidación del recientemente finalizado y atiende a una demanda del colectivo fallero que, a través de la Interagrupación, había exteriorizado en numerosas ocasiones.
La Inter ya había mostrado repetidamente su desagrado por el retraso, habida cuenta de la necesidad de las comisiones de realizar las gestiones o por el hecho de que ningún colectivo fallero ha hecho uso indebido de los casales. Se tenía el convencimiento de que el día 22, ya pasado el «peligro» de la semana coincidente con los festejos tradicionales, se abrirían, pero hubo que esperar a una reunión posterior con la consellera de Sanitat para conseguir, por fin, el permiso oficial para ayer mismo.
El texto sigue estableciendo todo tipo de limitaciones, como lo es el hecho de que los horarios serán en días laborables, no permitiéndose ni en festivos laborables ni en días de fiesta tradicionales. Por tanto, ni Viernes Santo ni el día de San Vicente, el 12 de abril, se podrá abrir. Mientras tanto, las elecciones y renovaciones de presidente y junta, en muchos casos, ya se están haciendo telemáticamente.
