El Ayuntamiento de Silla no ha tenido más remedio que acudir al Ministerio y al Consell Juridic Consultiu para intentar quitar la antena de telefonía móvil situada en la azotea de un edificio en la calle 25 de abril y que podría poner en riesgo la salud de los alumnos que asisten a los colegios Desamparados y Sanchis Guarner, cercanos a la instalación y sobre la cual los vecinos recogieron 1.400 firmas.
El ayuntamiento pidió a la empresa de telefonía que no activara la antena al superar las emisiones restringidas a 1 microwatio/cm2, fijadas en la ordenanza municipal, mientras que la empresa se ampara en la reforma de la ley de telecomunicaciones estatal que marca como límite 100.
Una diferencia sustancial de la que ha informado el gobierno de Silla mandando un escrito al Ministerio solicitando paralizar el funcionamiento de la antena, como marca la Ley, obligando al ente a responder en el plazo de un mes.
A su vez, ha consultado al Jurídic si el ayuntamiento tienen la capacidad jurídica necesaria para limitar las emisiones de radiación de las antenas que se situen en su término municipal y así saber qué criterios se deben seguir.
