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Paterna

El núcleo industrial que arrasó el fuego en Fuente del Jarro reactiva su actividad ocho meses después

Diversas empresas vuelven al trabajo y otra se ha reconstruido - Comienza la limpieza en la química que originó el incendio

El núcleo industrial que arrasó el fuego en Fuente del Jarro reactiva su actividad ocho meses después

Tres operarios del ayuntamiento de Paterna daban un día de esta semana un «agua» a la acera. La misma acera que invitaba hace ocho meses a pasar dentro de la nave que acogía los trabajos de la compañía de productos químicos que se envolvió en aquella nube negra. Un vigilante custodiaba la valla de la parcela para evitar el acceso al interior que, tras las rejas, se percibía chamuscado. Sin embargo, la luz empieza a entrar ahora y el suelo, entre otras cosas, vuelve a verse despejado.

El resto de empresas salen poco a poco adelante. «Van funcionando, se van levantando y van adaptándose a las circunstancias», explica Joaquín Ballester, gerente de la Asociación de empresas de Fuente del Jarro (Asivalco).

Menos Caselli. La empresa familiar de productos de limpieza vio su nave totalmente calcinada tras el incendio y tuvo que derribarla. Posteriormente, decidió abandonar su actividad.

Arppe, dedicada a la fabricación y distribución de accesorios para mascotas, ha podido hacer un «apaño» con otra parcela en la zona Táctica, conocida como el «tercer sector de Fuente del Jarro», al lindar con el polígono.

Por su parte, Albir, un negocio especializado en carpas para fiestas y espectáculos, ha levantado su espacio de nuevo y lo tiene alquilado a una firma de jardinería, suministro de materiales orgánicos y fertilizantes para la agricultura.

Artesanía Aitana cuenta con dos naves en el polígono. Una de ellas quedó muy afectada tras el incendio y se han realizado diferentes operaciones para volver a ponerla en funcionamiento. La segunda pudo continuar los trabajos ya que el fuego no alcanzó a tanto nivel las instalaciones pero sí el humo, lo que aún hoy les causa algunos problemas en la elaboración de sus productos. Por último, TDM Friccion y Layna se vio levemente afectada y aunque pasaron por algunas dificultades, tiran hacia delante.

La única nave que faltaba por limpiar era la de Indukern, el foco del primer fuego. Así, según Ballester, se lleva a cabo el «antepenúltimo paso» para volver a una buena situación para todas las empresas. «La retirada de escombros de la última fábrica perjudicada por el siniestro y que, además, fue el lugar donde se originó el fuego, es uno de los últimos pasos para volver a normalidad en el conjunto, explica el gerente.

El penúltimo paso, que costará algo más de tiempo es, según Ballester, que «todas las parcelas estén operativas y que cada empresa recupere su actividad». El último impulso a dar: hacer realidad medidas que mejoren la movilidad y la seguridad en el espacio empresarial Fuente del Jarro de Paterna.

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