El único gran vestigio del franquismo que queda en l'Horta es el mural de los caídos de Rafelbunyol, situado en la fachada de la iglesia, como tantos otros que hubo. El panel pervivió en el tiempo, en parte, por la larga duración en el cargo del alcalde ultraconservador Jaume García. El consistorio espera desde hace dos años el pronunciamiento del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana para retirarlo, tras obtener un primer pronunciamiento positivo judicial, que familias de loa 'caídos' recurrieron. La concejala de Memoria Histórica, Alicia Piquer, opina que «una cosa lleva a la otra» y «si Franco ha salido del Valle de los Caídos, ójala nosotros podamos quitar ese mural algún día, y cuando antes mejor».
