Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, a causa de obras de mantenimiento y mejora de la vía férrea en distintos tramos de la red con el subsiguiente corte de tránsito ferroviario, puso en marcha este lunes por la mañana un servicio sustitutorio de autobuses para cubrir el servicio que afecta al trayecto de la línea 1 comprendido entre las estaciones del Empalme, en Burjassot, y Bétera y que, previsiblemente, estará operativo “hasta el 31 de agosto”.

En estas circunstancias, los horarios se han visto modificados y “el tiempo de viaje se incrementa”. Además “el transporte en autobús no ofrece servicio nocturno mientras duren las obras”. FGV, obviamente, sí mantiene el servicio nocturno entre las estaciones del Empalme y Castelló de la Ribera, tramo no afectado por los trabajos de mantenimiento.

  Las paradas de autobús se encuentran a escasa distancia de las del metro y, en cada una de ellas, FGV ha puesto a disposición de los usuarios un informador. La frecuencia de paso del transporte sustitutorio es de “20 minutos” aproximadamente a excepción de las estaciones de Masies y Horta Vella. Allí los autobuses paran “cada 40 minutos”.

  En lo que se refiere a la Ciudad de los Silos y sus cuatro estaciones de la línea 1 –Godella, Burjassot-Godella, Burjassot y Empalme–, los usuarios, en líneas generales, se han tomado con ‘filosofía’ la alteración provisional del servicio público ferroviario. El verano pasado –entre finales de julio y principios de septiembre–, con motivo de las obras de soterramiento del tren a su paso por el barrio del Empalme, ya se la tomaron con paciencia. Dicen que la experiencia es un grado.

  En esta ocasión, la afluencia de usuarios del metro a las paradas acondicionadas para el servicio de autobuses también fue notable en su estreno. A la playa, de compras, de paseo. “Como estamos de vacaciones no vamos a mirar el reloj”, comentó la madre de una familia. Incluso hay quien acudió a una parada solamente para “experimentar la confortabilidad” de los autobuses de FGV. Una excursión.

  Con todo, algunos vecinos que viven cerca de las estaciones de Burjassot-Godella y Burjassot y utilizan la línea para desplazarse al trabajo en dirección a València, como ya hicieron el año pasado, han descartado la opción del autobús. Prefieren tomar el metro directamente en el Empalme o en Cantereria, estación de la línea 2, aunque les queden algo lejos de casa. “En unos 15 minutos me planto en Cantereria después de levantarme a la hora de siempre; no sé qué habría de hacer para tomar el autobús y estar a las siete y media de la mañana en el trabajo”, explicó un decorador del Hipercor de Campanar. Otros, para ir a trabajar a València, han pensado en el coche particular. “Ahora, en agosto, supongo que encontrar aparcamiento no dará demasiados quebraderos de cabeza; solo serán tres semanas”.

  Por otra parte, el ayuntamiento tiene previsto cortar el tráfico rodado en el tramo de la avenida Ausiàs March situado delante de la estación de metro de Burjassot-Godella en el momento que los operarios de Ferrocarrils de la Generalitat empiecen las obras de mejora en el paso a nivel y en un paso peatonal. La conclusión del trabajo está programada para el próximo miércoles. Una semana después, a partir del día 17, también se cortará al tráfico rodado la calle Mariano Ribera, junto a la estación de Godella, para mejorar el estado de su paso a nivel y el paso peatonal.