Alboraia modificará su plan urbanístico para evitar la demolición del chalet azul

El planeamiento urbanístico de 1991 contempla la construcción de viviendas en los terrenos de este edificio municipal

El inmueble del casco histórico será una oficina turística tras una reforma financiada por los fondos Next Generation

El chalet azul de Alboraia será la Oficina de Turismo del municipio a partir de 2026

El chalet azul de Alboraia será la Oficina de Turismo del municipio a partir de 2026 / L-EMV

Claudio Moreno

Claudio Moreno

El Ayuntamiento de Alboraia lleva meses trabajando en una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana que evite la demolición de su emblemático chalet azul. Tras recabar los informes urbanísticos preceptivos, el consistorio de l’Horta Nord envió hace semanas la documentación a Conselleria para que esta dé luz verde al procedimiento, que en un último trámite deberá pasar por sesión plenaria. 

Esta propuesta viene a reordenar el planeamiento urbano de Alboraia de 1991, aún vigente, que contempla un edificio de viviendas en los terrenos de chalet. Y el momento no es casual, pues Alboraia quiere darle un nuevo uso al edificio más característico del casco urbano. En concreto, prevé instalar una oficina de turismo mediante una reforma integral que debería estar lista en 2026 y que será financiada con dos millones de los fondos Next Generation.

De cara a percibir las ayudas europeas en tiempo y forma, el municipio busca incluir el edificio —actualmente declarado fuera de ordenación— en el catálogo de bienes protegidos del municipio, y a falta de una actualización del PGOU, esta modificación puntual es la herramienta más ágil e inmediata de la que dispone el municipio para preservar su patrimonio. 

A golpe de modificación puntual

La sesión plenaria de Alboraia del pasado mes de julio dio carpetazo definitivo a la propuesta de planeamiento urbanístico que el PSOE ha liderado en los últimos diez años. En ese tiempo la oposición ha ido tumbando todos los trámites del proyecto, alegando que se echaba de menos una mayor participación ciudadana en la definición del nuevo PGOU. Entre otras cosas, el proyecto de los socialistas planteaba finalizar las manzanas colindantes al polígono y la construcción de un carril bici, la edificación de un colegio e instituto para dar servicio a la población del casco histórico y la recalificación de una franja junto a la estación del Palmaret para levantar fincas de vivienda protegida. 

La modificación número 22 sirve para ‘parchear’ un PGOU anacrónico que el municipio no ha logrado actualizar

Asimismo, el plan buscaba proteger el casco urbano para respetar su uniformidad y su esencia mediterránea, impidiendo que las típicas casas de huerta no fueran convertidas en edificios de tres y cuatro alturas. Tampoco el chalet. Pero sin PGOU, el municipio recurre a una modificación puntual —esta es la número 22— que se sirve de la consultora contratada anteriormente para el diseño del proyecto frustrado. 

El chalet de las mil vidas

La futura oficina de turismo de Alboraia pasó a formar parte del patrimonio municipal después de quesus propietarios lo cedieran generosamente al municipio bajo el mandato de que el edificio tuviera un uso público de interés social. Cuando se formalizó este préstamo el municipio aprovechó para narrar, exposición mediante, las múltiples vidas del edificio que actualmente ocupa una manzana de la calle del Milagro. 

El sótano del chalet fue un punto de encuentro de vecinos ilustres, con su primer propietario, el exalcalde de Alboraia Cristóbal Monrós, como principal cabeza visible. Pero el inmueble también hizo las veces de refugio durante los bombardeos de la Guerra Civil, taller de producción de cirios —para combatir las estrecheces de la posguerra— , fábrica clandestina de puros y taller de curtido de pieles. El uso turístico engrosará su currículo.