Al menos cuatro reclutas del Ejército egipcio murieron y otras veinte personas resultaron heridas en un atentado cometido hoy con un coche bomba contra una sede de la Inteligencia militar egipcia en la localidad de Rafah, en la frontera entre la franja palestina de Gaza y Egipto.

Medios de comunicación estatales señalaron que un terrorista suicida empotró una camioneta bomba sobre las 08.00 hora local (06.00 hora GMT) contra un muro del complejo de los servicios secretos.

La explosión destruyó el muro y un edificio de dos plantas en el interior del recinto, además de causar daños en inmuebles y vehículos aparcados en las proximidades.

Dos de los muertos han sido ya identificados y tienen 22 y 24 años de edad, mientras que entre los heridos hay dos civiles.

Poco después, en una zona cercana, otro suicida hizo chocar el coche bomba que conducía contra un vehículo blindado de las fuerzas del orden en un puesto de control de la misma población.

Hay varios muertos y heridos, aunque todavía se desconoce el número exacto.

Tras estas deflagraciones, se registraron varias explosiones por el impacto de proyectiles de mortero en Rafah.

El ejército ha elevado el nivel de alerta en el Sinaí y ha cerrado las carreteras principales de la península.

El paso de Rafah, entre Gaza y Egipto, ha sido clausurado en ambos lados la frontera.

El sábado pasado, las autoridades egipcias lanzaron una gran operación contra los refugios de supuestos terroristas y radicales islámicos en el norte del Sinaí.

En los últimos meses, la zona se ha convertido en foco de inestabilidad y escenario de ataques contra efectivos gubernamentales y gasoductos, así como de actos de contrabando y secuestros.

La seguridad se ha deteriorado en Egipto, donde el jueves pasado el ministro de Interior, Mohamed Ibrahim, salió ileso de un atentado con un coche bomba en El Cairo que causó la muerte de una persona y heridas a más de veinte.