Esta es la pregunta que habitualmente le hacen a Susana antes de salir de casa. ¿Estamos en el siglo XXI o todavía seguimos en el XIX? Muchas mujeres a diario son insultadas, acosadas y maltratadas, física y psicológicamente por su opresor. Y no llega el día de que esto termine. Es aterrador pararse a pensar que en cualquier momento puede morir una mujer por violencia de género, cosa que ocurre. Es un acto horrible, que define a la persona que lo lleva a cabo como débil y cobarde, porque solo un perfil con estas características puede cometer semejante atrocidad. Hace varios días, el día 2 de octubre, fue el Día Internacional de la No Violencia. Es necesario que haya un día para que todos empecemos a tomar conciencia de que los actos violentos se deben de terminar y las muertes que ello conlleva. Hay que concienciar y educar a una parte de la sociedad que normaliza los actos de violencia. La educación como la mejor herramienta para reeducar y adquirir otros valores, necesarios para tener otra visión. Como dice Elie Wielson: «ante las atrocidades tenemos que tomar partido. La posición neutral ayuda siempre al opresor, no al que sufre». Estefanía Ruiz Sánchez. valència