La tormenta ha llegado a la Marina Alta con derroche de aparato eléctrico. A las 23 horas ha empezado a relampaguear. El resplandor ilumina el cielo y asemeja un castillo de fuegos artificiales lanzado desde el mar. De hecho, la tormenta se sitúa, de momento, mar adentro. Desde Xàbia, los rayos iluminan el Cap Martí y el Cap de Sant Antoni. Es una sucesión continua de relámpagos. Preludian la inestabilidad meteorológica que ha obligado a los ayuntamientos de la comarca ha activar las alertas ante la previsión de fuertes lluvias.

Xàbia y Dénia han limpiado imbornales y pluviales y han avisado a los campings. En el primer municipio, la policía local ya tiene listas las vallas por si hay que cerrar calles anegadas en núcleos tan críticos como el de la playa del Arenal. Por ahora la tormenta es un espectáculo (inquietante espectáculo) de relámpagos que rasgan el cielo.