El urbanismo de la piqueta, ese que consiste en tirar un viejo edificio turístico (hasta ahora eran chalés) para levantar otro modernísimo, se abre paso en Calp. La promotora Construcciones Europeas de Jávea, S. L., demolerá un edificio de apartamentos de 9 alturas de primera línea de la playa de la Fossa para construir una torre de 20 plantas. El proyecto está ahora en exposición pública. La empresa, eso sí, ya tiene mucho avanzado. En agosto de 2017, adquirió la finca, que ocupa una parcela de 2.237 metros cuadrados y que todavía está habitada. Sus fachadas dan al paseo marítimo y a la calle Ponent.
El paseo abraza un kilómetro de litoral. Ya no quedan más parcelas sin construir que la del «cráter» de las paralizadas obras del hotel de 27 plantas y 105 metros de altura. Imposible encontrar suelo. A menos que, como ha hecho esta promotora con sede social en Xàbia, se adquiera uno de esos primeros edificios de apartamentos que se levantaron en Calp y se eche abajo. El que se va a demoler se construyó en los años 70.
Ese urbanismo de la piqueta se ha hecho hueco en los acantilados de Xàbia (no es, por tanto, casualidad que sea una empresa de este municipio la que exporte el modelo a Calp). Las constructoras de chalés de lujo buscan casas que ya tienen sus años para comprarlas y demolerlas. Luego levantan viviendas de arquitectura vanguardista que venden por una millonada.
La futura torre de 20 alturas de primera línea de la Fossa escapa de esa nueva filosofía que anunciaron el concejal de Territorio, Juan del Pino, de Ciudadanos, y la alcaldesa, Ana Sala, del PP, de bajar de las nubes el urbanismo y limitar, en la primera línea, el techo de los nuevos edificios a 15 alturas.
La constructora ha proyectado una torre de 38 apartamentos (dos por planta) y otras tanta plazas de aparcamiento. Todas la viviendas tienen una terraza con vistas al mar. La empresa prevé que el presupuesto de contrata de las obras suba a casi 4 millones de euros.
El urbanismo residencial va a toda mecha en Calp. Mientras, los hoteles han dado un frenazo. Se está construyendo uno de pocas habitaciones en el acantilado del Borumbot (se derribaron dos chalés). Mientras, la alcaldesa destacó esta semana que el de la Fossa tiene «todas las licencias habidas y por haber». El empresario inició hace aproximadamente un año movimientos de tierra en el gigantesco socavón de primera línea. Pero se produjeron desprendimientos en una de las paredes laterales y paralizó las obras.
Ana Sala destacó que el ayuntamiento y la empresa del Suitopía, el techo de Calp con 30 alturas, han ganado el primer pleito a la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio. Mientras, el hotel de las dos torres gemelas, de 600 habitaciones y más de 30 plantas, está en los tribunales. La conselleria ha recurrido la licencia de ese nuevo coloso urbanístico.
La munícipe calpina se declaró encantada de que Calp tenga la cuarta planta hotelera de la Comunitat Valenciana (casi 4.000 plazas). Afirmó que este modelo rompe la estacionalidad turística.
