El servicio provincial de Costas, que depende del ministerio para la Transición Ecológica, le ha echado el freno a las reconstrucciones exprés que habían iniciado los empresarios con negocios en el domino público marítimo-terrestre de Xàbia. El temporal Gloria causó graves destrozos en los dos locales de primerísima línea de la playa de grava del Primer Muntanyar (el Benissero). Los empresarios se pusieron rápidamente manos a la obra. Retiraron el mobiliario irrecuperable. Iniciaron los trabajos para rehacer las plataformas de hormigón sobre la que se asientan estos negocios, que resultaron seriamente dañadas. Pero, según ha podido saber este diario, llegó una inspección de Costas y paralizó esas obras. Desde hace días no se mueve allí una piedra. Los negocios están precintados. Esa medida persigue que no se cuelen los curiosos. Está peligroso.

Costas aprovechará ahora para revisar la ocupación que a la largo de los años han realizado estos negocios y cerciorarse de que no se han «apropiado» de más playa de la que les permite la concesión.

Paralización, a rajatabla

La paralización se está cumpliendo a rajatabla. La posible multa por incumplirla no se envía sólo a los empresarios que gestionan estos negocios, sino también a las firmas que lleven a cabo los trabajos. Los obreros no se exponen a pagar una sanción.

Estos locales, de moda en los últimos años, lo tendrán complicado para abrir en Fallas, época en la que ya empezaban a engrasar la maquinaria de cara a Semana Santa y Pascua. El estropicio es grande. No se repara de un día para otro. Y Costas quiere comprobar que, a lo largo de los años, estos negocios no han ido arañando metros de playa pública.