El Fiscal de la Sala de Medio Ambiente y Urbanismo ha enviado un oficio a la Dirección General de Cultura y Patrimonio para solicitarle un informe que aclare «a la mayor urgencia» si unas obras que ya se han iniciado en primera línea de la costa de Calp (se va a levantar una torre de apartamentos de 15 alturas) podrían estar dañando restos arqueológicos.
El Ministerio Público ha comunicado la petición del informe a la Asociación Cultural y Ecologista de Calp (ACEC), que fue la que denunció que los trabajos en la parcela donde antes estaba la Casita Blanca (un pintoresco chalecito construido en los primeros años del turismo y que hace meses se demolió) podrían destruir vestigios arqueológicos. ACEC apeló a la Fiscalía tras no obtener explicaciones del ayuntamiento, gobernado por PP y Ciudadanos, sobre si se habían realizado catas arqueológicas.
En el litoral de Calp, existe un yacimiento romano extraordinario como el de Banys de la Reina.
Este colectivo ecologista denuncia la «desafección» del gobierno local por «la sostenibilidad y el patrimonio». Ya puso el grito en el cielo cuando se demolió la Casita Blanca, una construcción que revelaba los gustos arquitectónicos de los primeros turistas; no estaba protegida. Ahora se ha echado las manos a la cabeza cuando ha entrado maquinaria pesada. Una promotora alzará aquí una nueva torre de apartamentos.
