Los trabajadores de Marina Salud, la concesionaria de la gestión sanitaria en la Marina Alta, harán huelga los días 4, 5 y 6 de mayo. Los sindicatos y el comité de empresa habían planteado un día de paro. Pero los empleados, que llenaron el salón de actos del hospital en la asamblea de ayer (acudieron más de 200 trabajadores), consideraron que a estas alturas había que ejercer más presión. Incluso llegaron a hablar de llevar a cabo una huelga indefinida. Finalmente, se acordó que el paro durara tres días. Ahora la batalla será definir los servicios mínimos. El objetivo es que la actividad sea esos tres días como la de un fin de semana.

La asamblea reflejó el hartazgo de la plantilla. La negociación del convenio colectivo con la dirección de Marina Salud (la empresa la controla ahora totalmente Ribera Salud) está estancada. La empresa sigue ofreciendo una mejora salarial que los trabajadores consideran ridícula. Ofrece un incremento del 1,5 % este año y del 2 % en 2023. Pero el convenio actual data de 2014 y desde entonces ha subido mucho más la inflación y el nivel de vida. Además, los trabajadores hacen muchas más horas que los de otros departamentos de salud.

Ahora que la conselleria de Sanidad ha sacado 6.000 plazas estructurales todavía se ha agravado más la fuga de profesionales de la Marina Alta. Y eso provoca que los trabajadores que siguen en el departamento de salud de Dénia soporten cada vez una presión asistencial más fuerte. La plantilla es corta para el volumen de trabajo.

Los trabajadores han insistido en que la dirección de Marina Salud no los valora. La huelga de tres días llega tras las movilizaciones realizadas durante el mes de marzo en el hospital y los centros de salud.