Cuarenta años de historia satírica en Xàbia

¿Un tesoro? Mejor no ser remilgados. Esto es dinamita, TNT, nitroglicerina o, lo que es lo mismo, una carcajada, una estentórea carcajada. No hay nada más disolvente, regenerador y honesto que la risa. Un estallido de risa es temible. Una detonación.

A Kristian Lutaud se le conoce por ser un chef revolucionario. Formó un excepcional tándem creativo con Ferran Adrià en El Bulli. Otra de sus pasiones son los cómics y las revistas satíricas. Es de Lyon, la ciudad donde se inventó el guiñol. Se desternillaba con el "Hara-Kiri" y "Charlie Hebdo", las dos revistas más ácidas de Francia. En España, se aficionó a "El Jueves". Lo empezó a comprar "religiosamente" en 1982. Guardó todos los números, más de 1.400. Ahora los ha donado a la biblioteca del puerto de Xàbia. Chus San Pedro ha ordenado y archivado la colección.

El chef que dejó El Bulli para revolucionar la cocina de Xàbia y la Marina Alta

«Es historia. Historia satírica y contundente. Repasando estos ejemplares y sus portadas se puede reconstruir la evolución de estos 40 años», afirma Chus, que recuerda que esta revista circuló por bares emblemáticos de Xàbia como la Galería, el Mandrágora o el Bamba.

Kristian ha donado todos esos ejemplares con los que se tronchó de risa. Se ha guardado uno, eso sí, el que en 2007 los jueces secuestraron al considerarlo ofensivo con la monarquía. "La prensa satírica es anticlerical, antiburguesa y antimonárquica", recuerda este chef, quien también fue lector voraz de "El Víbora" y "Cairo". Le encantan el sarcasmo y las historietas mordaces y con mala leche.

En Xàbia, también hubo una revista satírica. Se llamó "Dijous Mercat" (el homenaje a "El Jueves" era evidente). Kristian y Chus participaron en esa disparatada publicación que también se inspiraba en la tradición satírica valenciana de aquella incendiaria revista de finales del XIX y principios del XX llamada "La Traca".

Ahora la biblioteca del puerto de Xàbia guarda en una estantería donde también hay una excelente colección de discos de vinilo una colección que no es un tesoro, sino pura pólvora.