Tras el comunicado de Asun Moll, además de la eliminación de zonas verdes en el interior del núcleo urbano, nos preocupa el futuro de todas las fallas del municipio.

Tras la decisión del Gobierno local de eliminar una zona ajardinada para plantar una falla, nos congratula que la vegetación retirada de la plaza del Sol haya sido trasplantada, pero como ya indicamos, las zonas verdes en el interior del núcleo urbano son islas de vegetación que cumplen determinadas funciones y la sustitución de toda o parte de una zona verde por pavimento y maceteros afectará negativamente a esa zona. La concejala de Fiestas se equivoca al creer que las intervenciones agradarán a "todos los vecinos" pues hay personas que están en contra de que se pavimente esa zona.

El comunicado publicado en la web del Ayuntamiento, insiste en justificar la eliminación de la zona verde en su supuesto deterioro y en que se usaba como pipi-can ilegal. Desde nuestro punto de vista, si la zona está deteriorada, lo más acertado es intervenir para revitalizarla y poner los medios para su conservación, pero es más, como las personas incívicas van a seguir visitando con sus mascotas las zonas ajardinadas que quedan, esperemos que la respuesta municipal no consista en convertir toda la plaza del Sol en una explanada pavimentada, eso sí, con maceteros.

Desde la Associació Veïnal La Victòria, felicitamos al ayuntamiento porque afirman tener previsto instalar aparatos «de ejercicio físico saludable» pero le animamos a ubicarlos en zonas no ajardinadas de la plaza, así como que contemplen otras reivindicaciones como la instalación de sanitarios y fuentes, en esa y otras plazas.

El Gobierno local debería propiciar una ciudad donde el espacio público se convierta en espacio de encuentro, participación, ocio, etc., en un entorno calmado de tráfico empleando mini bosques urbanos, donde las aceras se amplíen y las calzadas disminuyan. Donde la movilidad que fomenten sea principalmente el uso de modos de transportes no motorizados sobre los espacios públicos ganando en calidad de vida con más zonas peatonales como la zona que estamos tratando con muchos niños y muchas personas por la proximidad del mercado y las tiendas proponiendo ganar en dinamismo comercial, reduciendo los niveles de contaminación y sobre todo proponiendo zonas donde las fallas no se tengan que ser plantadas encima de un antiguo jardín. En línea con lo anterior, probablemente la actividad comercial mejore si en lugar de arrasar parte de la plaza, se hace que sea más atractiva para la ciudadanía y si en lugar de considerar la actividad fallera como un problema, desde el ayuntamiento se ayuda a los comercios para que aprovechen las oportunidades que para la actividad comercial ofrece la peatonalización temporal y el incremento de viandantes que suponen las Fallas.

Para finalizar, en su comunicado la concejala de Fiestas indica que «la Policía Nacional, €, dicen sentirse acorralados por la cantidad de calles que se cortan, lo que supone una especial afección sobre la seguridad y el normal desarrollo de su tarea» e incluso habla de los perjuicios, que a juicio de la edil, genera la falla a la actividad comercial en la zona del mercado. Teniendo en cuenta que en las inmediaciones de muchas fallas hay comercios, que se cortan calles y avenidas en todo el municipio y que incluso hay más plazas en las proximidades de algunas fallas, es obvio que nos preocupemos por saber si tienen previsto limitar las intervenciones a la zona de la plaza del Sol, pues lo argumentado por la edil puede afectar al modo en que en nuestro municipio podrán seguir celebrándose las Fallas, una festividad que recordemos son Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.