El Ayuntamiento de Sagunt ha previsto inicialmente una inversión de 4,5 millones de euros para hacer realidad sus planes de remodelar el paseo marítimo y la avenida Mediterráneo del Port. Pese a que el alcalde, Darío Moreno, ha advertido en reiteradas ocasiones que este proyecto «llevará años», el tripartito ha dado otro paso adelante con la convocatoria del concurso por casi 54.500 euros para elaborar el expediente que permita obtener la concesión por parte de la Demarcación de Costas de estos 115.000 m2 de dominio público marítimo terrestre.
A expensas de que se resuelva el procedimiento de contratación y la consultora elegida presente su trabajo, para lo que tiene un plazo de 12 semanas, el consistorio ya ha fijado algunas condiciones del proyecto. Entre ellas destacan la conexión con la senda blava y el puerto comercial en sus dos extremos; la repavimentación unificada del paseo y la avenida; la renovación también conjunta del alumbrado, con uso prioritario de energías renovables, y el mobiliario; el tratamiento de la vegetación; la inserción de un carril bici y su conexión con otros viales no motorizados; así como la propuesta de urbanización para el aparcamiento y las pistas de tenis que se encuentran junto a la plaza de la Concordia.
Uno de los aspectos más peliagudos es la intervención en los edificios existentes, sobre los que el ayuntamiento se compromete a facilitar la información acerca de la vigencia de las concesiones. En este capítulo se incluyen los inmuebles en el número 40 de la avenida Mediterráneo, frente a la oficina de turismo, entre los que se encuentran la estación de bombeo, que «mantiene su uso, pero debe legalizarse la actividad»; la antigua sede de la Cruz Roja, que «ya está en trámites de concesión con una finalidad pública no lucrativa», así como La Lonja, que sigue abierto como restaurante.
Además, este pliego de condiciones señala sobre el edificio del Antiguo Casino que «inicialmente tiene uso lúdico, pudiendo ser también la escuela de deportes náuticos». En este documento, firmado por un arquitecto municipal, también se señala el uso de restauración del Plenamar y que «los edificios que tengan la concesión vigente deberán ser estudiados a nivel de diseño, sin que posteriormente se actúe en ellos».
Otra de las condiciones del contrato licitado por el consistorio saguntino es la distribución del proyecto por bloques de actuación, para «posibilitar en su caso que la intervención integral pueda abordarse por fases o como un gasto plurianual», según el pliego.
«Justa reivindicación»
El expediente de contratación resume la necesidad de esta actuación en que «se pretende dar satisfacción a una antigua y justa reivindicación de la vecindad ante la infrautilización de espacios y el deterioro que presenta», mediante «la reordenación de usos y actualización del paseo y sus instalaciones anexas».
En busca del mayor consenso en la definición de este «imprescindible» proyecto, el ayuntamiento abrió un proceso de participación pública, que recogió más de un millar de encuestas personales, más las aportaciones de distintos consejos municipales. Las ideas principales inciden en más zonas de sombra, arbolado autóctono, accesibilidad y espacios adecuados según su uso, como informa la concejala, Ana María Quesada. Estas propuestas deberán ser tenidas en cuenta en la documentación que el ayuntamiento ha encargado.
