La Cooperativa de Viver regresa un año más a La Mostra de Vins de Proava para visibilizar un proyecto que pone el foco en la apuesta por poner en valor el territorio, el respeto y los productos de proximidad. Entre las novedades que acercará durante estos días a los visitantes de la Mostra destaca principalmente el vino La Perdición, una de las referencias clásicas de la entidad que con la última añada estrena nueva imagen externa y un renovado coupage que refleja la inconfundible esencia del territorio del Alto Palancia.

Para esta nueva añada se ha potenciado la presencia de la variedad Syrah, una uva que vegeta especialmente bien en esta comarca castellonense y ofrece un excelente perfil enológico, al que acompañan una combinación de Tempranillo con un toque de Merlot y Garnacha madurada durante 12 meses en barrica de roble francés. El nuevo vino, con una limitadísima producción de apenas 5.500 botellas, ya se presentó hace unas semanas coincidiendo con la celebración del Mesón del Vino de las Fiestas de la Magdalena de Castellón y ahora serán los visitantes de la Mostra los que tengan la oportunidad de descubrir un vino que se convierte en uno de los grandes referentes de la nueva realidad del vino en Castellón.

Una de las novedades que presenta este año en la Mostra es la añada del vino La Perdición. ED

Además de la nueva añada de La Perdición y el resto de vinos que produce la Cooperativa bajo el sello ‘La Piel de la Vid’, en el stand de la entidad castellonense también se podrán degustar otros de los productos que producen, como las nueces de Viver, un fruto excepcional que gracias a la combinación de suelo, clima y altitud presenta una textura mucho más carnosa y sabrosa.

Hace más de un siglo

La Cooperativa de Viver comenzó a levantar los cimientos de la entidad hace más de un siglo, en 1915, con la creación de ‘La defensora de Viver’, una cooperativa que comenzó su andadura con la oliva como protagonista. Un siglo después la cooperativa se ha convertido en todo un referente para el sector agrario en la provincia de Castellón, y sus vinos y aceites se comercializan en más de medio mundo.

Actualmente la entidad cuenta con diferentes secciones en función del tipo de cultivo de cada socio. Así, la almazara procesa la aceituna que aportan los agricultores asociados, principalmente de la variedad Serrana de Espadán, con la que elaboran uno de los aceites de oliva virgen extra (AOVE) más apreciados, ‘Lágrima’, una marca que se ha convertido en todo un referente para la alta restauración. Nueces, almendras, frutas, hortalizas, y otros cultivos como la alubia del Confit complementan un proyecto bien diversificado en el que también se pone el acento en el “agroturismo”, un concepto para poner en valor el turismo de interior en plena naturaleza que propone experiencias singulares y también personalizadas en torno al mundo del aceite y el vino.

Productos de Natur Viver. ED

Tras renovar las instalaciones de la cooperativa, estas visitas guiadas suponen una inmersión en primera persona en el mundo de la producción y elaboración de aceite y vino. Además organizan periódicamente eventos de carácter lúdico festivo como Tiempo de Vendimia, en septiembre, el Viver WineFest, que tiene lugar durante el mes de agosto, la Feria de la Nuez y la Almendra o ‘La Piel de la Vid’, experiencia ganadora absoluta en la primera edición de premios Creaturisme para disfrutar todo el año.

Con todo, la Cooperativa de Viver sigue defendiendo un proyecto de agricultura digna para las personas y el territorio y poniendo en valor los productos agroalimentarios de la comarca del Alto Palancia para que la tierra y sus frutos sigan siendo el motor socioeconómico de un municipio que es un orgulloso ejemplo de un sector agrícola vivo y dinámico.