Cuando se observan las noticias, una a una, es difícil encontrar una narración coherente que explique la evolución de los hechos (más bien, se la ha de construir uno mismo). Pero, a veces, las informaciones encajan como en un puzle y puede captarse la situación con más claridad. Veamos.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), los datos de los últimos años reflejan un aumento de la brecha entre los que disfrutan de un empleo indefinido a jornada completa y los que deben conformarse con un trabajo precario: un asalariado temporal gana ahora un 63 % respecto a lo percibido por un empleado fijo; hace seis años, la cuantía era del 69 %.
Pero los afortunados fijos tampoco se libran. Según los expertos económicos José Ignacio Conde Ruiz, Sergi Jiménez y Marcel Jansen, de Nada es gratis, menos de la mitad de quienes tenían contrato indefinido en 2007 se mantienen en la misma empresa seis años más tarde (yendo el resto a parar a: otras empresas con menos sueldo, la temporalidad, el trabajo autónomo o el paro).
Por si fuera poco y para complicar algo más el escenario, ha salido el gobernador del Banco de España a explicarnos las verdades del barquero sobre nuestras futuras pensiones: la caída-estancamiento demográfico actuales conducirán a una reducción de las pensiones públicas? lo que obligará a combinarlas con el consiguiente ahorro privado. Un ahorro que suena a chiste, cuando casi un 40 % de los jóvenes entre 25 y 34 años vive en casa de sus padres, como consecuencia del citado empleo precario o, directamente, se encuentran desempleados.
¿No creen que los que mandan de verdad tratan de decirnos algo sobre nuestro futuro económico?
