Golpe al tráfico de seres humanos. La Guardia Civil, en colaboración con la policía lituana y coordinado por la Europol, ha desarrollado en los últimos meses la operación «Sanura» contra el tráfico de seres humanos para su explotación laboral. Para ello se realizaron cinco registros domiciliarios en las localidades de Sueca, Mareny de Barraquetas, Nàquera y Olocau, donde se consiguió liberar a 12 personas que vivían hacinadas en pisos y en condiciones insalubres, además de ser maltratadas física y sicológicamente para que aceptasen continuar trabajando.En la operación fueron detenidas seis personas, cuatro varones y dos mujeres de edades comprendidas entre los 29 y los 60 años y de nacionalidad lituana a los que se les imputa ahora los supuestos delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, contra el derecho de los trabajadores, falsificación de documentos, tráfico de drogas, lesiones, coacciones y pertenencia a organización criminal.

Falsas expectativas de trabajo

La organización, compuesta por ciudadanos lituanos, se encargaba de captar mediante el engaño a las víctimas, todas originarias de Lituania, ofertándoles falsas expectativas de trabajo. Eran trasladados a España en furgonetas de la propia organización o en autobuses de líneas regulares. Ya aquí, el responsable de la organización comunicaba a las víctimas la contracción de una deuda por el traslado a España. Asimismo, la organización les obligaba a residir en la misma vivienda en condiciones de insalubridad y seguridad, con conexiones ilegales al tendido público, en habitaciones o buhardillas y sin agua caliente. Del dinero que ingresaban se les descontaba una parte por gastos de manutención y del viaje por el traslado a nuestro país llegando algún trabajador a percibir tan solo 39 euros por mes de trabajo.

El líder de la organización se lucraba con la venta de droga, pudiendo intervenir unas 140 plantas de marihuana, así como el equipamiento necesario para realizar la plantación. La operación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción nº 2 de Sueca.