El Ayuntamiento de Almussafes recibirá una subvención de 300.000 euros de la Generalitat Valenciana para reformar la planta baja de la Casa Ayora, situada en la calle mayor de la localidad ribereña. Ayer, el Consell aprobó el convenio de colaboración entre la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio y el consistorio municipal para hacer efectiva la ayuda que se anunció a finales de 2017, y a la que se unirán otros 100.000 euros con cargo a fondos propios de la administración local. Cantidades destinadas a rehabilitar un espacio que está previsto convertir en un museo, entre otros usos. Unas actuaciones que incluirán el refuerzo estructural y la consolidación del techo.
La emblemática construcción de dos plantas situada en la calle Mayor y que fue adquirida por Dolores Ayora Olcina en 1901, será reformada este mismo año y el objetivo es preservar el valor artístico e histórico del edificio. Para ello, se contará con un presupuesto total de 400.000 euros, gracias a la última aportación de la administración autonómica, y a los 100.000 euros con cargo a fondos propios del consistorio. «"Estamos muy contentos porque desde la Generalitat Valenciana han entendido que la rehabilitación de esta vivienda es necesaria. Se trata de un edificio histórico de gran valor para los almusafenses que debemos preservar y la subvención nos permitirá abordar las obras de manera mucho más rápida que si fuera sufragada íntegramente por el ayuntamiento», destacó el alcalde de Almussafes, Toni González. De hecho, las actuaciones a realizar incluirán el refuerzo estructural, ya que el edificio está deteriorado, y servirán para consolidar o evitar el hundimiento descontrolado de algunos de los elementos dañados.
Trabajo urgente
El estudio de las patologías existentes en la Casa Ayora realizado por el ayuntamiento constató que era necesaria una intervención para cumplir las normativas vigentes y evitar el progresivo deterioro al que está siendo sometida. El plazo de vigencia de este convenio finaliza el 31 de diciembre de 2018 y se podrán financiar a su cargo las actuaciones realizadas desde el 1 de enero de 2018.
Con el convenio, se ha dado el impulso definitivo para recuperar la Casa Ayora, antes de que finalice el año. Aunque está previsto que albergue un museo, su grandaria permitirá que el edificio no esté destinado a un solo uso. De hecho, está previsto que se valoren las distintas opciones que votaron los vecinos en una consulta, donde también tomó fuerza la posibilidad de convertirse en recinto para albergar ceremonias civiles.
