«He tenido mucha suerte, lo puedo contar de milagro». Daniel Clemente volvió a nacer el jueves por la noche, aunque el 28 de marzo no será una fecha para recordar en la agenda de efemérides de este joven de 19 años de Tous y su familia. Tampoco la olvidarán nunca. Se dirigía a trabajar por el carril derecho de la autovía A 7 en dirección a València cuando un camión que circulaba en paralelo a él por el carril central puso el intermitente y se abalanzó hacia el Citroen Xsara que conducía. «Aceleré un poco para escaparme, pero me golpeó en la puerta de detrás y el coche se me fue hacia la izquierda dando varias vueltas de campana», relató ayer todavía desde el Hospital de la Ribera. El turismo acabó volcado en el carril rápido de la autovía y el camión siguió como si nada hubiera sucedido.

Dani considera que es imposible que el conductor del tráiler no se percatara del accidente. «Mi coche tuvo que pasar necesariamente por delante de él», relata. Sólo recuerda que era un camión de gran tonelaje con la cabina de color rojo. La Guardia Civil ha abierto una investigación para intentar localizar el vehículo e identificar el conductor, mientras la familia de Dani ha realizado un llamamiento a través de las redes sociales por si algún testigo de lo ocurrido puede aportar una pista que permita esa identificación. «Al menos para arreglar los papeles, porque por el coche ya no puedo hacer nada», dijo. Siniestro total.

El accidente se produjo el jueves en torno a las 21,30 horas, cuando el joven se dirigía a la empresa de Carlet en la que trabaja. Asegura que circulaba por la autovía a una velocidad de entre 80 o 90 km/h cuando, a la altura de l'Alcúdia, el camión se desplazó contra él desde la izquierda y su vehículo salió despedido. Según le han contado, dio dos vueltas de campana y llegó a impactar con otro turismo. Él no era consciente de estos detalles. Se quito el cinturón de seguridad y pudo salir a rastras por la ventanilla. Otros vehículos se detuvieron a auxiliarle. Dani asegura que fue el sábado cuando le mostraron el estado en que había quedado el turismo que conducía cuando se percató de la gravedad del accidente. «Desde dentro no tenía la sensación de que hubiera habido tanto riesgo, pero me paré a mirar las fotos bien se me revolvió todo», describió a Levante-EMV, mientras decía no entender la actitud del chófer que, según su relato, había provocado el accidente.