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Alzira descarta rescatar para la gestión pública el servicio de limpieza urbana

? El gobierno adjudica un contrato transitorio de un año a la espera de licitar uno de diez ? «No es posible la municipalización sin una empresa pública»

Una trabajadora de FCC, empresa que ha ofrecido el servicio durante los últimos 25 años. vicent m. pastor

El progresivo rescate de servicios privatizados que el gobierno de Alzira impulsó en el anterior mandato -recuperó para la gestión pública la limpieza de colegios, las escuelas infantiles, la emisora municipal y la piscina, estas dos últimas por mandato legal- no tendrá continuidad con la limpieza viaria y la recogida de basura. El nuevo gobierno acaba de adjudicar este servicio por un año a la empresa Fomento Valencia Medioambiente (Fovasa), en un expediente iniciado a finales de la anterior legislatura que se concibe como una transición hacia un contrato de mayor envergadura.

El concejal de Servicios Públicos, Fernando Pascual, confirmó ayer que el ayuntamiento no tiene intención de municipalizar la limpieza urbana -un servicio que cuenta con 60 trabajadores- «porque no es posible si no se constituye primero en una empresa pública», indicó. «Es la única fórmula, las únicas poblaciones de más de 50.000 habitantes que tienen el servicio municipalizado es a través de una empresa pública, a veces participadas por empresas privadas, pero aquí vamos a continuar externalizando el servicio», indicó el edil, mientras señalaba que el gobierno tiene «prisa» por sacar un nuevo pliego para licitar un nuevo contrato para diez años.

Tres empresas pujaban por este contrato de transición, que finalmente se ha adjudicado Fovasa al presentar la oferta más económica: 2,2 millones de euros (IVA incluido). FCC ha prestado este servicio en Alzira desde que el ayuntamiento decidió externalizarlo en 1994, confirmó Pascual.

El edil recordó que el gobierno no quería a las puertas de las elecciones ofrecer un contrato de larga duración que hipotecara la gestión de futuras corporaciones y optó por uno corto que propiciaba también una adjudicación más rápida. «No es lo mismo un contrato de dos millones de euros que uno de veinte», comentó, mientras indicaba que a mayor volumen suelen concurrir un mayor número de empresas con expedientes más voluminosos y más largo es el proceso de estudio.

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