El Museu de la Festa abrió el sábado el nuevo espacio dedicado a Leonardo Borràs que, ubicado en la primera planta del Convent de Sant Vicent, acoge la valiosa colección donada por la familia Borràs a la ciudad. Así nace este espacio dedicado al estudio de la trayectoria del autor y su contribución a la escultura contemporánea que irá renovando su discurso expositivo anualmente para abordar distintos ámbitos de la obra del autor, informaron ayer fuentes municipales.
Como destacó el concejal de Cultura, Pere Blanco, «esta sala no es sólo un espacio de conservación de una impresionante colección sino que se plantea como un centro de documentación para estimular proyectos y estudios en colaboración con la Universitat de València».
La primera exposición que se presenta en este nuevo espacio museístico lleva por título «El llegat d'unes mans» y, comisariada per Àlex Villar y alumnos del máster de Patrimonio Cultural y el de Cultura Visual, plantea un itinerario que adentra al visitante en los rincones de su vida a partir de unas obras que articulan los ideales estéticos de Leonardo Borràs (Algemesí, 1923) revelados poéticamente por sus manos.
Forman parte de esta colección importantes obras en bronce, modelos originales de monumentos públicos, esbozos y piezas íntimas en las que descubrimos al artista más auténtico, que busca la captación del alma a partir del rostro en máscaras, cabezas y bustos.
La relación con Fuster
Algunas tienen la belleza inédita de aquello inacabado; otras, más esmeradas en su definición, conectan con el hiperrealismo escultórico de los años setenta, en una especial connivencia estética con el escultor italiano Giacomo Manzú.
En la muestra también se repasa momentos cruciales de su trayectoria, su paso por la Academia, su condición de catedrático de instituto de Dibujo, su relación con personajes del mundo de la cultura como Joan Fuster, Martí Domínguez o Bernat Montagud.
Todo ello le hizo merecer el nombramiento de Académico de San Carlos, además de la inestimable consideración de su ciudad natal donde se le considera como un maestro de maestros y principal impulsor del círculo artístico de Algemesí.
