La escalada de contagios de Covid en la comarca no cesa. El ritmo al que se expande el virus recuerda, ligeramente, a lo sucedido hace un año. Después del puente de octubre, los casos se multiplicaron. Alzira prácticamente ha duplicado su incidencia acumulada en una semana, especialmente tras el brote de una treintena de contagiados en una fiesta. Y L’Alcúdia marca la tasa más elevada de la Ribera, lo que ha obligado al consistorio a suspender todos los actos públicos en recintos cerrados. La historia se repite y los sanitarios tiemblan.
Aunque ahora gran parte de la población está vacunada, todavía hay miles de personas en la Ribera que, en caso de contraer la enfermedad, tendrían una probabilidad mayor de acabar en una camilla del hospital. Al mismo ritmo que crecen los contagios, aumenta la preocupación de autoridades municipales y sanitarias.
En Alzira, los casos activos son aproximadamente el doble que hace una semana. La incidencia entonces era de 127 positivos por cada cien mil habitantes mientras que ahora el dato ya es de 222, con 103 contagios en los últimos catorce días. La cifra se ha elevado considerablemente a raíz de un brote de origen social, notificado esta semana por la conselleria de Sanitat, con una treintena de afectados. Una parte de ellos por vacunar. Por ello, el consistorio insistió en que cualquier persona está todavía a tiempo de hacerlo para reducir el riesgo.
L’Alcúdia es el municipio de la comarca donde más han crecido los contagios en las últimas semanas, también a raíz de reuniones y celebraciones sociales. La localidad tenía ayer una incidencia acumulada de 557 casos por cada cien mil habitantes, el dato más elevado del área comarcal de salud. Por ello, ha suspendido toda actividad que fuera a desarrollarse en espacios públicos cerrados hasta el 30 de noviembre.
El índice de Guadassuar, que sobrepasaba ayer los 300 casos por cada cien mil habitantes, también preocupa. En contraposición, Benifaió descendía hasta los 73.
El alcalde alzireño reprocha las «negligencias»
El alcalde de Alzira, Diego Gómez, reprochó ayer las «negligencias» que llevaron a generar una treintena de contagios en una fiesta de cumpleaños celebrada en una discoteca, «un local cerrado y sin las medidas de protección correspondientes», apostilló. Al respecto, realizó un llamamiento a la responsabilidad de la ciudadanía: «Creo que es muy importante, en estos momentos en que la situación parece que empieza a empeorar y vuelven a subir los contagios, que tomemos todos conciencia en el ámbito personal de la necesidad de prevenir cualquier actuación, sobre todo en los lugares cerrados, y del uso necesario y obligatorio de la mascarilla», manifestó.
