El río Albaida se libera de la caña invasora en Manuel

El ambicioso proyecto de restauración fluvial que impulsa la CHJ simultanea los trabajos en los términos de Manuel, Senyera y Castelló

Eliminación de las cañas del río Albaida a su paso por Manuel.

Los trabajos de eliminación de la caña invasora en el curso bajo del río Albaida han llegado prácticamente al ecuador en el término municipal de Manuel, donde aguas arriba del badén que comunica el casco urbano con la zona deportiva de les Salines ya se ha instalado incluso la cubierta de geotextil para evitar que vuelvan a brotar las cañas, mientras que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) también está trabajando en los términos municipales de Senyera y Castelló para completar un proyecto de restauración de un tramo de tres kilómetros del cauce que abarca una superficie de 28,9 hectáreas y que, como adelantó Levante-EMV, supondrá una inversión de tres millones de euros.

Los trabajos de este ambicioso proyecto de restauración fluvial financiado por la Unión Europea comenzaron en la primera quincena de septiembre y sus consecuencias ya se pueden comprobar, especialmente en Manuel, aunque se trata de una actuación a medio plazo ya que la cubierta opaca deberá permanecer durante 18 o 20 meses para acabar con el rizoma de la caña antes de plantar especies de ribera autóctonas que permitan un uso lúdico del cauce.

En el caso de Manuel, el proyecto actúa sobre 1.480 metros lineales del cauce del Albaida. Fuentes de la CHJ señalan que los trabajos se encuentran en este tramo aproximadamente al 50 % y, tras la instalación del geotextil aguas arriba del badén que cruza el río, está previsto proceder a la eliminación de la caña aguas abajo. Paralelamente se está trabajando en Senyera y Castelló y, según indican, los trabajos siguen el calendario previsto.

La CHJ ha impulsado este ambicioso proyecto recogieno las demandas de Xúquer Viu y los ayuntamientos de la Ribera ubicados a las orillas del Albaida que tiene como objetivo eliminar la caña invasora y sustituirla por especies vegetales autóctonas que mejoren la biodiversidad y ayuden a vertebrar los tres municipios en los que se actúa. El proyecto se ha estructurado en varias fases, la primera de las cuales, que consiste en la eliminación de cañas, está previsto que se complete en diez meses. En este proceso se está utilizando la técnica del desbroce y triturado de la parte aérea de la planta para, una vez acondicionado el terreno, instalar la cubierta geotextil de polipropileno con el objetivo de agotar el rizoma de la caña. Estas lonas permanecerán 18 meses como mínimo y, transcurrido este período, se plantarán especies autóctonas.