El grupo municipal de Compromís per Vilallonga señaló ayer, en referencia a la aprobación del presupuesto municipal por parte del Gobierno local del PSPV-PSOE, que votó en contra del documento de cuentas presentado por el alcalde, Enric Llorca, porque en aquel pleno la primera autoridad municipal se negó a dejar ese punto encima de la mesa, petición que le transmitieron los concejales de Compromís con el fin de «aclarar las numerosas dudas que tenemos», entre ellas que la plantilla de personal «no estaba completa porque faltaban dos plazas interinas de Policía Local».
El portavoz de Compromís, Santi Alberca, considera que el alcalde «actuó al margen de la ley» al impedir que el pleno decidiera si se aplazaba para otra sesión la votación sobre el presupuesto, y añadió que no es la primera vez que eso ocurre.
Alberca también responde a las declaraciones del alcalde, publicadas ayer en este mismo periódico, en las que aseguró que las dos concejalas que considera tránsfugas, más los grupos del PP y de Compromís «actúan de mala fe y pretenden fastidiar al pueblo» al impedir aprobar el presupuesto y solicitar la supresión de la Junta de Gobierno Local.
Refiriéndose a Compromís, el concejal Alberca señaló que «en ningún caso nuestro objetivo de suprimir la Junta de Gobierno busca dificultar la acción de gobierno, sino más bien lo contrario. Es para que el funcionamiento del ayuntamiento sea más barato y más eficiente, eliminando órganos superfluos».
