«El próximo domingo los gandienses tenemos que demostrar que no estamos contentos con esta alcaldesa que perdió las elecciones». Así suena el último mensaje electoral, con la voz de Arturo Torró, que el PP de Gandia difunde a los cuatro vientos de cara a las elecciones generales del domingo. El objetivo del exalcalde y líder del PP gandiense es inequívoco: quiere convertir estos comicios al Congreso y al Senado en un plebiscito al Gobierno local que forman el PSPV-PSOE y la coalición Més Gandia. Y, de paso, a Ciudadanos, cuyo concejal, Ciro Palmer, le impidió ser alcalde tras las elecciones municipales.
Por eso Torró gana cada día más protagonismo en esta campaña y advierte a los gandienses de que, si no se vota por Mariano Rajoy, en España se puede producir un «desastre» similar al de Gandia, y azuza el fantasma de un gobierno en Madrid formado por «independentistas y republicanos».
Aunque sea la persona que más ha querido resaltar la vertiente local de estas elecciones en toda España, los resultados se analizarán en el contexto de Gandia por parte de todos los partidos.
La cuestión clave es hasta qué punto el voto emitido en esta ciudad el domingo que viene supondrá un aplauso o un castigo al nuevo Gobierno local que dirigen la alcaldesa socialista Diana Morant y la vicealcaldesa de Compromís, Lorena Milvaques.
Hace ahora cuatro años el resultado fue clarísimo. Los gandienses dieron al PP 21.127 votos, una aplastante mayoría que supuso el 56 % del total y que, trasladado al ayuntamiento, habría supuesto una mayoría absoluta mucho más holgada que la de los 13 concejales logrados meses antes.
El PSPV-PSOE logró menos de la mitad de votos que el PP, 9.266, lo que representa el 24,72 %. Compromís se quedó con 2.409 sufragios y un 6,42 %, mientras que Esquerra Unida alcanzó 1.941.
A la luz de todas las encuestas, que el PP no va a revalidar esa mayoría tan aplastante, de ahí que la clave local de estas elecciones, es saber si entre el PSPV-PSOE y Compromís-Podemos superan en votos a la formación de Torró, en cuyo caso ambos partidos interpretarían estos comicios como un aval al pacto que les ha permitido apartar al PP del Gobierno de Gandia.
Si no es así y el PP repite su éxito con un amplio respaldo ciudadano, entonces será Torró quien desde el primer momento se encargue de extender la idea de que los ciudadanos censuran el pacto local que le impidió gobernar.
Y se mirará con lupa, por parte de todos, el resultado que obtenga Ciudadanos, un partido que no se presentó hace cuatro años y al que todas las encuestas le auguran un considerable apoyo electoral. En Gandia no serán pocos los que relacionen el porcentaje de sus votantes con la figura de Ciro Palmer, el concejal que dio la sorpresa el pasado junio y, al entregar su voto a Diana Morant, permitió la formación de un gobierno de izquierda que dejó al PP en la oposición.
