Un año de trámites le ha costado al concejal de Territorio de Gandia, Xavier Ródenas, encontrar la fórmula legal para evitar el cierre definitivo del servicio público de alquiler de bicicletas de Gandia, denominado Saforbici, que desde hace meses se encuentra en una situación agónica. Cientos de usuarios han dejado de usar las destartaladas bicicletas del sistema, si es que todavía encuentran alguna base donde estén disponibles.
La fórmula legal encontrada para no infringir el Plan de Ajuste Económico que Gandia está condenada a cumplir ha sido aceptar la propuesta de una empresa, Impursa, que ha solicitado formalmente al ayuntamiento hacerse cargo de Saforbici a cambio únicamente de la publicidad que pueda instalar en soportes municipales y en las propias bicicletas que circularán por la ciudad.
La propuesta de Impursa, asociada con Labici, otra empresa que gestiona las bicicletas públicas en varias ciudades españolas y del extranjero, ha llevado al Gobierno local a aprobar las condiciones para, aproximadamente en un mes, sacar a concurso la gestión de Saforbici.
Según ha podido saber este periódico, Impursa-Labici ofrece incrementar las estaciones, añadir nuevos municipios a la red «metropolitana» de Gandia, mejorar el sistema informático para que su uso sea más sencillo para los usuarios y, lo más importante, poner 500 bicicletas nuevas con diseño antivandálico. Todo ello cumpliendo la premisa de no pedir ni un céntimo de inversión pública.
La propuesta de Impursa-Labici no puede adjudicarse directamente, de manera que esta misma semana se iniciará el proceso para licitar la gestión de Saforbici y entregarla a la mejor oferta que se presente, algo que, según se estima, puede prolongarse durante cerca de tres meses.
Evitar el cierre este verano
El paso dado ahora por el Gobierno local también evitará que durante todo el verano Saforbici desaparezca, dado que en la actualidad apenas quedan un centenar de vehículos rodando y los que se estropean ni siquiera se reparan.
Así, Impursa-Labici se ha comprometido con el ayuntamiento a incorporar en unas semanas 150 bicicletas nuevas a cuenta de las 500 que se colocarían inmediatamente si, previsiblemente en octubre, gana el concurso público.
La oferta de estas dos empresas se vislumbra difícilmente mejorable porque, como ha podido comprobar este periódico, además de todas las mejoras citadas, Impursa-Labici se compromete a instalar enchufes para cargar bicicletas eléctricas en algunas de las bases de la ciudad, así como sistema automático de inflado de ruedas, que también podrá ser utilizado por usuarios que lleven bicicletas privadas.
De la misma manera, la propuesta señala que utilizar Saforbici será de lo más sencillo porque en las bases se podrán obtener directamente abonos para periodos que van de un día a un año.
