La ciudad de Gandia se quedó la mañana del pasado 25 de diciembre, día de Navidad, sin uno de sus vecinos más ilustres, que destacó a lo largo de su vida por su implicación en el asociacionismo, Josep Lloret Tarrasó.
De entre todas sus facetas, en una de las que más se le conoce fue la fallera. No en vano, presidió la Federació de Falles de Gandia (antes Junta Local Fallera) durante 23 años en dos etapas diferentes. Lloret fallecía alrededor de las 9 de la mañana a los 86 años de edad. Ayer era despedido por familiares, amigos y vecinos de Gandia en una multitudinaria misa que tuvo lugar en la parroquia de Crist Rei.
A mediados de 2015 fue nombrado por el ayuntamiento como Hijo Predilecto de Gandia. En aquel acto, el entonces alcalde, Arturo Torró, destacó de él su implicación «en la actividad social de la ciudad. Un hombre metódico al que le gustan las cosas bien hechas y que ha sacado tiempo suficiente para implicarse y participar en el tejido asociativo de la ciudad de Gandia», dijo.
Y no es para menos. Además de su faceta de fallero, Josep Lloret Tarrasó fue presidente y fundador de la cofradía de Sant Pere de la Setmana Santa de Gandia.
Licenciado en derecho, ejerció como maestro en la Escola Pia y en el colegio Madres Escolapias de Gandia. El día de su fallecimiento, algunos de sus exalumnos destacaban de él los valores que enseñaba en clase y, sobre todo, que era «una gran persona».
También fue concejal del Ayuntamiento de Gandia, formó parte de la junta directiva de Fomento de Agricultura e Industria y ejerció como presidente de la banda de música de la ciudad.
Su última aparición pública tuvo lugar en la «demanà» de la fallera mayor infantil de Gandia, Marta Ribera, el pasado mes de julio. Aún no hace dos años vivió un triste capítulo en su vida, el fallecimiento de su hijo, Josep Lloret, que entonces ostentaba el cargo de presidente de la Federació de Falles de Gandia.
Una saga fallera
Además de Pep, Lloret tenía otras dos hijas. Cristina, y Ana Lloret Escrivà. Esta última fue fallera mayor de Gandia el año 1985, el que se celebraba el centenario de la llegada de las Fallas a la ciudad.
La alcaldesa, Diana Morant, dedicó unas palabras a quien era Hijo Predilecto en su muro de Facebook. Le describió como «una buena persona; amigo de sus amigos», señaló. Narró, además, que ese mismo día de la «demanà» de Marta pudo hablar con él. «Estaba muy alegre, bromeaba. Me hizo mucha ilusión reencontrarme con él», indicó.
El ayuntamiento decidió bajar las banderas a media asta como motivo de duelo ante el fallecimiento de Lloret.
La ciudad de Gandia ha perdido en 2016 a dos de los tres hijos predilectos que fueron nombrados el año pasado. El pasado mes de mayo fallecía José Puig Miret, el «pare Puig» a los 92 años de edad, creador del Comedor Social.
