Marcos Estruch y Amparo Aparisi han coordinado esta actividad, que se puso en marcha entre los colegios interesados en noviembre del año pasado, con el curso ya iniciado. La iniciativa ya ha acabado, y lo ha hecho con notable éxito para ser su primera edición, con alumnos de ocho centros: María de los Ángeles Suárez de Calderón, Esclaves, Borja-Jesuïtes, Los Naranjos, Las Colinas y Escolapias.

Desde Proyecto K aseguran que ya hay más centros educativos interesados para la próxima temporada. Se organizó una liguilla entre los colegios participantes y el pasado domingo, 30 de abril, tuvo lugar la final en el parque Ausiàs March.

La Escuela OCR es un proyecto pionero en toda España, ya que es la primera vez que se introducen las carreras de obstáculos como una actividad extraescolar. «Está dirigida a alumnos de tercero y cuarto curso de Primaria, y tiene sobre todo unos fines muy pedagógicos, porque buscamos en el desarrollo de habilidades sociales», explica Estruch.

Aquí, por ejemplo, también se valora la maña antes que la fuerza, y el trabajo en equipo, así que todos los alumnos pueden aportar algo, con independencia de sus condiciones físicas. Las pruebas requieren más agilidad que esfuerzo físico. La empatía, la superación personal y la mejora de la autoestima son valores que han trabajado y en los que han incidido los monitores de la Escuela OCR en cada sesión. También se implica en el proyecto el profesorado de educación física de cada colegio. Las carreras se realizaron en las instalaciones de Som Paintball, en la avenida del Grau de Gandia. La final del campeonato, apunta Marcos Estruch, «fue una jornada fantástica donde disfrutaron los niños y también sus familiares y amigos, que estuvieron animándoles en cada momento». La prueba contó además con la presencia de presidente de Obstacle Course Racing de España, Claudi Fogués, que tomó buena nota de esta experiencia.

La intención de los promotores es preparar una nueva edición para el próximo curso escolar.