La jornada continua, el horario escolar en el que el alumnado de infantil y primaria recibe clases solo por la mañana es una realidad en la mayor parte de los colegios de la comarca de la Safor. En apenas tres cursos, este nuevo método pasará de ser una medida experimental a implantarse en el 70% de los centros educativos públicos y concertados.
Del total de 50 escuelas que se contabilizan en los municipios de la Safor, el próximo curso ya ofrecerán este tipo de jornada 35. De ellas, 32 son públicas y tres concertadas: El Verge del Rebollet y San José de la Montaña de Oliva, y el Santa Anna de Villalonga, que arrancará con este sistema a partir del próximo mes de septiembre después de que el miércoles pasado los padres dieran el respaldo mayoritario al cambio de horario.
El resto de concertados, que se concentran en Gandia y Tavernes de la Valldigna, no han movido ficha, de momento, para implantarlo.
El primer colegio en poner en marcha la medida como prueba piloto fue el Verge dels Desemparats, de Oliva. La experiencia llevó al resto de centros de la ciudad, menos el concertado Verge del Rebollet, el Francesc Carròs de la Font, el Mestre Rafael Noguera de Daimús y el Sant Marc de Beniarjó a participar en la primera consulta que puso en marcha la Conselleria de Educación para que los padres decidieran si optaban por el cambio horario. La iniciativa salió adelante en todos menos en el de Beniarjó, donde no se llegó al 55% exigido por la Conselleria para autorizar el cambio. En el curso 2016-2017 se implantó la jornada continua por primera vez de forma oficial en la comarca.
Para el actual curso ya se unió el grueso de los municipios. Ahí entraron, tras la aprobación de los padres y madres, la mayoría de públicos de Gandia (todos menos Benipeixcar y les Foies), los cuatro de Tavernes de la Valldigna, el único concertado de Oliva que aún no lo aplicaba y los de localidades como Bellreguard, Xeresa, Miramar, Rafelcofer o Simat, entre otros. Para el ejercicio 2018-2019 entran otros siete centros, lo que esta misma semana decidieron por mayoría acogerse al nuevo método horario.
De los tres referéndums que hasta ahora se han celebrado en la Safor, el «sí» ha sido siempre la opción mayoritaria. Solo en el caso de Beniarjó y Xeraco no se aprobó, no porque la mayoría de padres lo declinara, sino porque el apoyo afirmativo no superó el mínimo del 55%.
La experiencia de los dos cursos con el nuevo método en funcionamiento ha hecho que el deseo de las comunidades educativas por implantar el horario de clases de 9 a 14 horas se haya ido extendiendo y de ahí que la votación del pasado martes fuera tan abrumadora a favor del cambio.
Actualmente ya son más los colegios con jornada continua que los que siguen ofreciendo las clases de 9 a 12 y de 15 a 16.30 horas.
En Gandia, de hecho, el único de titularidad pública que no ofrecerá esa opción el próximo curso es el Benipeixcar, cuya comunidad no ve de momento viable ponerla en marcha por la especial configuración interna del centro.
El Castell de Almoines, Beato Carmelo del Real de Gandia, el CRA Potries-Palmera-Barx y el CRA Vernissa, que incluye a Llocnou y Almiserà son los otros centros educativos públicos que no han optado por este nuevo formato y no prevén hacerlo tampoco el próximo curso.
La jornada continua ofrece clases lectivas solo por la mañana, de 9 a 14 horas, mientras que por las tardes, hasta las 17 horas, las niñas y los niños pueden acudir a actividades extraescolares, que, como publicó este periódico, a partir del próximo curso podrán ser de pago después de una modificación de la orden de la Conselleria de Educación que dirige Vicent Marzà.
