Desde 2008 es jefa del Área del Tiempo de Televisión Española y preside la Asociación de Comunicadores de Meteorología (Acomet). Mónica López, licenciada en Físicas y Mujer del Tiempo («como la fruta», bromea) desde 1997, es uno de los rostros más populares de la televisión. Y no solo porque la información del tiempo es quizás el espacio que consigue la mayor audiencia, sino porque su simpatía y sus dotes comunicativas traspasan la pantalla. Ayer estuvo en Gandia para pronunciar la conferencia inaugural del curso 2018-2019 en el Campus, titulada La comunicación del cambio climático.
«Es uno de los grandes retos de la humanidad», afirmó López, «y uno de los mayores problemas del cambio climático es la desinformación y la despreocupación de la gente». Según esta meteoróloga, no se está transmitiendo bien la gravedad de la situación, «y eso es culpa de todos».
La crisis económica mundial dejó en un segundo plano el interés internacional por evitar el calentamiento global. «Y, además, la gente se cansa muy pronto de los catastrofismos, no podemos decirles todos los días: ¡vamos a morir todos!», señala con su característico sentido del humor. Por ello, «es necesario trasladar la información de forma clara, amena y didáctica, y es imprescindible la participación de todos los agentes, desde el mundo científico y político al de la comunicación».
¿Y qué puede hacer un ciudadano de a pie? La solución la están mostrando muchos expertos pero apunta directamente a nuestra forma de vida y a nuestro sistema económico. «Para evitar el cambio climático hay que consumir menos», señala con contundencia. «No es normal que con las naranjas que hay aquí las compremos de otros lugares del planeta, y las de aquí las exportemos fuera». El transporte de mercancías a larga distancia, y la producción y el consumo innecesarios de recursos y productos es la mayor causa del calentamiento global. Consumir menos y comprar productos de proximidad es una de las armas que tiene el ciudadano para plantar cara al problema, así como «elegir bien a los representantes políticos», agrega López, pues son ellos los que han de tomar decisiones.
Según López, el cambio climático no es un futurible, «es una realidad que se está constatando ya en muchos puntos del planeta». ¿Y cómo afectará a zonas como la Safor? «El Mediterráneo se ha caracterizado siempre por tener periodos de sequía alternados con episodios de lluvias torrenciales», comentó, «y lo que va a pasar es que estas sequías y estas lluvias torrenciales van a ser mucho más severas».
